Medio: La Estrella del Oriente
Fecha de la publicación: viernes 22 de marzo de 2019
Categoría: Institucional
Subcategoría: Tribunal Supremo Electoral (TSE)
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En realidad, la norma establece que la convocatoria para las elecciones generales debe hacerse 150 días después de las primarias y para la elección se tiene un plazo similar, pero adelantando el proceso ya no se cumple la normativa vigente, vulnerándola irónicamente, reiteramos a requerimiento expreso del ejecutivo y del propio Presidente de la República Evo Morales.
Luis Fernando Camacho, enfatizó “que no se debería adelantar los comicios porque no afectarán los resultados, precisando que en realidad están incumpliendo varias normas, incluyendo el resultado del referéndum del 21 de febrero de 2016”. En este contexto los opositores piden renuncia de vocales del TSE, dado el antecedente de que se someten a las denuncias y caprichos del Movimiento al Socialismo, tras conocerse el adelanto de la fecha de elecciones generales para el 20 de octubre, las que en realidad estaban previstas para el 27 de ese mes; arguyéndose en este contexto que se pretende evitar que coincida con los comicios de Uruguay y Argentina.
Al fustigar esta sorprendente contingencia, enfatizó “que definitivamente los niveles de confianza de la sociedad en el TSE bajan a cero, con el irónico antecedente que los únicos que confían en este Tribunal son los que van a votar por el MAS”. Coincidiendo con Víctor Hugo Cárdenas presidenciable por UCS se advierte que “no es noticia la nueva fecha de las elecciones, sino el hecho de que otra vez se obedece una orden de Palacio, se acata el capricho del ejecutivo, que insólitamente ya ordenó públicamente que se cambie la fecha de elecciones”.
Por nuestra parte pensamos que el empadronamiento en Argentina se ha vuelto irónicamente una razón de Estado para el TSE, pero no se pone el mismo esfuerzo en ciudades del exterior donde hubo protestas a favor de que se respete el voto del referéndum del 21 – F.
En su conferencia, Camacho tácitamente se imbuye en su medular consigna metafórica “Vamos a Mover Santa Cruz”, respondiendo a la promisoria propuesta que presentó en el plausible afán de fortalecer la Institución, la defensa de la democracia, en un año electoral marcado por las protestas por el 21 – F, dando la impresión de que su coherente y enérgico alegato manifiesto en su conferencia de prensa, no solo iba dirigido a la comunidad cruceña, sino que a la del país todo, contexto plasmado en su “memorándum” y una pre constituyente, que estima le tomara sus dos años de gestión. (continuará)