Medio: La Razón
Fecha de la publicación: viernes 01 de marzo de 2019
Categoría: Institucional
Subcategoría: Tribunal Supremo Electoral (TSE)
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El senador y candidato a la presidencia por la alianza Bolivia Dice No, Óscar Ortiz, denunció que el Movimiento Al Socialismo (MAS) pretende adelantar un mes las elecciones generales previstas para octubre.
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El vicepresidente Álvaro García respondió que esa es una responsabilidad del Tribunal Supremo Electoral (TSE), a quien -recordó- solo se le pidió decidir qué hacer para garantizar el voto de los bolivianos en Argentina y Uruguay, donde se realizarán elecciones generales al mismo tiempo que en Bolivia.
“Le dijimos al Órgano Electoral que vea este tema y que decidan qué hacer, hay algún problema, resuelvan como mejor convenga y nosotros vamos a acatar la decisión que tome el Órgano Electoral”, sostuvo.
Si las elecciones de Bolivia terminan coincidiendo con las de Argentina y Uruguay, los bolivianos corren el riesgo de no participar por los problemas de logística que se presentarán. Ya el canciller FDiego Pary dijo que en los colegios donde votan los nacionales se instalarán meses de votación para las elecciones argentinas, por ejemplo.
“Queremos denunciar la intención que tendría el gobierno de MAS de adelantar un mes las elecciones. Ahí queremos fijar una posición muy clara, no existe ninguna justificación para adelantar (por un mes), el MAS no puede fijar la fecha de las elecciones”, consideró Ortiz.
La Cancillería emitió un comunicado en el que hizo conocer al TSE la preocupación que habrían expresado los bolivianos radicados en Argentina y Uruguay al verse impedidos de participar de las justas nacionales si su realización coincide con la fecha de similares procesos electorales en esos dos países. En el documento pide a las autoridades electorales "analizar las condiciones" para garantizar el voto de los nacionales.
García aclaró que el Gobierno solo transmitió la preocupación de los residentes bolivianos y no es su responsabilidad definir la fecha de los comicios.
Según Ortíz, el mover la fecha de las elecciones generales significaría un “cálculo político” del partido en función de Gobierno y demostraría la manipulación del Gobierno.
“Si el motivo de mover la fecha es que van a estar ocupados los recintos de las escuelas en Argentina, bueno, habrá que mover siete días para adelante o siete días para atrás”, planteó.
El 25 de febrero, el vicepresidente del TSE, Antonio Costas, consideró prematuro y un “debate innecesario” hablar de fechas de las elecciones generales. (01/03/2019)
