“El estatuto orgánico del FRI y la Ley de Organizaciones Políticas no reconocen acuerdos políticos entre personas particulares y partidos políticos, por eso la alianza con De Mesa es nula de pleno derecho. Solo las organizaciones políticas están habilitadas para realizar estos pactos”, declaró Landívar a Cambio.

Además, observó que los principios del FRI —que postulan el bien común, el interés colectivo y el espíritu solidario— contradicen el individualismo encarnado en el sistema neoliberal de privilegios y discriminaciones que pregona De Mesa, vicepresidente y sucesor de Gonzalo Sánchez de Lozada.

“Un ejemplo son las medidas antipopulares que implementó su gobierno favoreciendo a las empresas extranjeras”, afirmó.

Además, mencionó que por el acuerdo con De Mesa los militantes de su partido pierden todos sus derechos para ser elegidos y ser miembros de la directiva, porque el candidato de la alianza impuso sus términos para trabajar con su gente y, por eso, los más estrechos colaboradores pertenecen a su entorno.

El secretario general del FRI, Wálter Villagra, ante las declaraciones de Landívar, dijo que los miembros de la Dirección Ejecutiva Nacional solicitaron al Tribunal de Honor del FRI expulsar a Landívar porque vulneró los estatutos del partido y no acudió a las instancias respectivas.