“Este Órgano Electoral no garantiza unas elecciones limpias, dependerá del grado de la presión popular, presión ciudadana que se ejerza, porque sí el MAS gana las elecciones limpiamente nadie podría objetar, pero que juegue limpio; pero comenzó forzando dos candidaturas y eso va terminar mal”, dijo Waldo Albarracín, rector de la Umsa.

Lamentó que lo vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE), no puedan garantizar elecciones generales transparentes y peor aún que no reúnan los requisitos para determinarlos como un árbitro confiable y creíble.

“Lo que es peor es que no nos garantizan una elección transparente porque los miembros del Tribunal Electoral, estén actuando como vulgares funcionarios gubernamentales, por tanto no reúnen los requisitos de credibilidad, idoneidad, imparcialidad y transparencia; no se puede llevar adelante una elección con un árbitro que ha mostrado parcialidad”, aseguró.

Por su parte, el analista Iván Arias coincide con los criterios del rector de la Universidad Mayor de San Andrés (UMSA) cree que una de las resoluciones de los cabildos en todo el país debe ser que los vocales del TSE renuncien y que esto debe ser una primera lucha de los partidos políticos.

“Esta es la próxima lucha que tienen que emprender los partidos políticos, porque son los más afectados y serán los más afectados, porque no pueden ir con un Tribunal Electoral cooptado, siendo ellos los jugadores, no pueden ir al juego electoral con un árbitro parcializado, es decir, en la cancha están el oficialismo y la oposición y debe haber un árbitro confiable”, afirmó Arias.

“En ese sentido, solo la presión social y política podría lograr que renuncien los vocales, manifestó Arias, no bastará la protesta callejera esto se debe llevar al ámbito nacional e internacional, en el evento de hoy, los tres años del 21F, se deberá sacar resoluciones donde se busque un Tribunal Electoral independiente y creíble”, puntualizó.