“Le gustaría al Presidente un enterramiento que no se va a producir ni se ha producido (…), lo único que está enterrado aquí es una candidatura ilegal por la que el pueblo no votará” en octubre, manifestó Mesa en conferencia de prensa desde Cochabamba, junto a su acompañante a la Vicepresidencia, Gustavo Pedraza.

Ayer, Morales aseguró en Chimoré, uno de los bastiones del oficialismo, que se logró enterrar el 21F a nivel internacional con la presencia de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que sesionó en pasados días en la ciudad de Sucre, y con las elecciones primarias.

Mesa rebatió los argumentos de Morales sobre el supuesto enterramiento del 21F y dijo que, primero, el 21 de febrero “fue una artimaña para la legitimación de una candidatura ilegitima y fue un gran fiasco”. En referéndum pese a que fue impulsado por el propio gobierno, lo perdió.

En segundo lugar, refirió, la CIDH dijo claramente que “no estaba viniendo a Bolivia para tocar el tema vinculado al 21F, nosotros lo planteamos como ciudadanía y como sociedad, pero en ningún momento la Comisión dijo que este tema está descartado, esa es una interpretación alegre del presidente” Morales.

En ese sentido remarcó que el 21 de febrero se va a trasladar al 27 de octubre, el día de la elección, y “ahí el Presidente va a comprobar un segundo y categórico no a su ilegal postulación a la presidencia”.

Mesa junto a Pedraza se encuentran en una gira por Bolivia para hacer conocer a la población sus propuestas y recibir sugerencias de la gente con miras a los comicios generales de octubre.

El binomio Evo Morales – Álvaro García logró habilitarse para los comicios generales de octubre de este año con un fallo cuestionado del Tribunal Constitucional, que le permite ser candidato de manera indefinida pese a que el resultado del referéndum constitucional de febrero de 2016 no lo permite.