Esta gestión 2019 debía elegirse al jefe de la bancada de Diputados de UD, pero surgió, una vez más, las pugnas, esta vez entre diputadas, María Calcina versus Shirley Franco, ambas de UN pero enfrentadas porque las dos aspiran a ser jefes de bancada.

La alianza UD y MDS tienen acuerdos internos de “buena fe”, dicen algunos legisladores, pero es el conflicto de cada gestión especialmente en la Cámara de Diputados.

El año 2015 comenzaron con la jefatura con Jimena Costa, aliada de UN; el año 2016 le tocó a Lourdes Millares, militante de MDS; el 2017 Wilson Santamaría, militante de UN; el 2018 Gonzalo Barrientos, militante de MDS y este año la jefatura le corresponde a UN.

Y el conflicto se generó, justamente al interior de ese partido, porque la diputada Calcina fue elegida por diputados solo de UN y Franco fue elegida por diputados, tanto de UN como MDS, a estas desavenencias, entre militantes de un mismo partido, critica la diputada y expresidenta de bancada de 2015, Jimena Costa. Ella asegura que el dilema no es de intereses personales sino de aspectos éticos.

“Priman los problemas éticos, no es un interés personal es un interés de principios y valores; los políticos tienen intereses pero no pueden traicionar sus valores, es decir a uno les interesa la bancada y a otros no? (…), la pregunta es, quieres trabajar con personas que solo quieren plata, contratar a alguien para darle el sueldo y quitarle la mitad o se quiere hacer fiscalización al oficialismo?, porque para eso nos han elegido”, dijo Costa.

La legisladora afirmó que su bancada está dividida desde que comenzó la gestión, porque ella denunció la corrupción de sus correligionarios.

“El problema se ha gestado, no entre los partidos políticos Unidad Nacional y Demócratas, sino desde los diversos que no queremos reproducir las viejas prácticas y no lo hicimos; pero los viejos políticos y sus adláteres (acompañantes) y esbirros, no les importa, cualquier partido que tengan, sirve”, manifestó la diputada de UD. Jimena Costa.

Aseguró que la división de la UD no tiene solución “porque no se pueden tranzar principios y valores”, porque los nuevos políticos que ingresaron fue para servir al país y no reproducir las viejas prácticas.