El Tribunal Supremo Electoral  recibió hasta esta semana 106 solicitudes para la revocatoria de autoridades electas por voto. 58 fueron aceptadas, 15 rechazadas y 33 siguen en trámite. Entre ellas destaca el del alcalde de Cochabamba, José María Leyes.

“Una cosa es el acto de corrupción, para eso está la Fiscalía, pero otra cosa es por razones políticas tratar de revocarnos, eso no comparto", señaló el jefe de Estado durante un acto público.

Aseveró que a un dirigente no se le puede dar trabajo, contratos o beneficiar a sus familiares, y por eso inician algunas campañas de revocatorio. “No hay inversión cuando estamos enfrentados", lamentó Morales.

“Cuando el alcalde trabaja bien todos los concejales también tienen que trabajar", resaltó, señalando que incluso los opositores se suman cuando se dan cuenta que existen obras que benefician a la población.

En Cochabamba, la Federación de juntas vecinales y sectores de los gremialistas se manifestaron ayer en contra de la solicitud de revocatoria del alcalde Leyes, mientras que los legisladores demócratas le manifestaron su apoyo y atribuyeron la solicitud a una "venganza" por organizar movilizaciones contra el código penal.  El dirigente cocalero Leonardo Loza, respondió: “la ciudadanía evaluará, hay procedimientos propios, nosotros no hemos solicitado la revocatoria”.