Medio: Página Siete
Fecha de la publicación: viernes 01 de febrero de 2019
Categoría: Organizaciones Políticas
Subcategoría: Democracia interna y divergencias
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Entre las pruebas que deben presentar están: fotografías de la papeleta de sufragio marcada con un signo en la casilla de los candidatos, la dirección del recinto electoral donde supuestamente votaron y, “si es posible”, un certificado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) que pruebe que el funcionario “sí” emitió su voto.
La exigencia está relacionada -informaron- con los resultados preliminares que emitió el Tribunal Supremo Electoral (TSE) sobre las internas, los cuales mostraron que sólo el 32% de militantes del Movimiento Al Socialismo (MAS) votó por el binomio Evo-Álvaro.
“Esa fue la principal razón, creo. Nos dijeron que si queremos mantener nuestras fuentes de empleo debemos presentar pruebas de que votamos por Evo y Álvaro”, denunció un servidor público, quien pidió reserva de su nombre y de la entidad donde trabaja para evitar represalias, como el despido.
Otro servidor público, que también pidió reserva, denunció que la Máxima Autoridad Ejecutiva de su fuente laboral, antes de exigirles pruebas, los reprendió. “Nos dijo: ‘Ustedes debían asegurar que sus familiares, que son militantes del MAS, vayan a los recintos electorales a votar por el Presidente, ésa era su tarea’”, relató el funcionario.
Los servidores públicos informaron que tienen hasta la próxima semana para entregar “las pruebas” de que apoyaron al binomio Evo-Álvaro.
De acuerdo al cómputo final de las internas que presentó el TSE, de
los 991.092 militantes habilitados del masismo, 451.026 fueron a las
urnas. De ese total, 405.339 partidarios (40,89%) votaron por el
binomio Evo y Álvaro. En cambio, 540.066 militantes del MAS no
asistieron a los recintos.
El resultado preocupó al MAS. Antes de los comicios, el presidente Morales -en diferentes actos en los que fue proclamado como candidato- aseguró que dará “waska” a la derecha.
Antes de la realización de las internas, Rimay Pampa reveló un audio en el que presuntamente un alto ejecutivo de una entidad pública amenaza con sanciones a aquellos funcionarios que no voten en las primarias.
En el registro también se revela que supuestamente se creó una aplicación para conocer, a través del número de celular, dónde exactamente estará el funcionario. “Ahora, hay un aplicativo que han hecho (en) Presidencia. A ver, en el caso de la licenciada Layme, está en un colegio X en Senkata; desde la mañana hasta que termine el escrutinio tiene que estar ahí”, dice un funcionario, reportó ese portal.
En octubre de 2018, antes de las primarias, funcionarios de
diferentes entidades del Estado también denunciaron que fueron obligados
a registrarse como militantes del MAS y que luego fueron forzados a
salir a las calles para inscribir a nuevos partidarios.