Santa Cruz fue escenario para la reunión de dirigentes de partidos políticos, comités cívicos, plataformas civiles y miembros del Conade, para tratar una agenda inicial en busca de la unidad de estas fuerzas para conformar un solo bloque que haga frente a la repostulación del binomio oficialista, además de afirmar el cumplimiento de las propuestas ciudadanas en defensa del voto soberano, respetando lo que manda la Constitución, reafirmando también la vigencia del resultado del 21 F.

Al inicio de la reunión los participantes coincidieron en las propuestas de orden general, pero no pudieron avanzar en la estructuración de un solo frente porque, "son varios los ciudadanos que tienen aspiraciones para servir al país desde los altos cargos de gobernabilidad". Tal situación expresada con cierta franqueza por algunos dirigentes y con algunos escrúpulos por otros, mostró que sería muy difícil, sino imposible, ceder posiciones y aceptar la nominación de un solo binomio de candidatos opositores. Simplemente no pasó de buenas intenciones y muy escuetas propuestas de conformar un frente único.

Se escucharon muchas intervenciones de dirigentes políticos y cívicos en torno a las condiciones en que se desarrolla un proceso electoral hacia las primarias del último domingo del presente mes, en las que algunos partidos movilizarán a sus militantes, pero aclarando que "en todo caso será una presencia representativa de cada partido", como justificación de su presencia en una elección primaria sin candidatos internos que justifique el voto militante.

De aquí adelante, por supuesto que cualquier intento de lograr un pacto de unidad entre opositores, será simplemente retórico y una afrenta a la voluntad del soberano que exigía a los dirigentes de partidos y plataformas deponer actitudes personales y elegir candidatos de consenso y con perspectivas de imponer una corriente de unidad civil para "tomar el poder" y aplicar los cambios que proponen los candidatos renovadores.

En los hechos, los dirigentes de partidos de oposición, no todos, pero si una mayoría, revelaron sus posiciones y las mismas están claramente dirigidas a la búsqueda de resultados sectáreos, aunque con algunos atisbos de "buscar alianzas", más adelante.

Finalmente el encuentro de "corrientes opositoras" culminó con la firma de un acuerdo de nueve puntos entre los que sobresale el pedido y la gestión para la aplicación de la Carta Democrática de la OEA, para la restauración plena de la democracia en Bolivia, lo que implica además un abierto rechazo a la repostulación del binomio oficial, situación que se considera ilegal, aunque ahora cambia la figura, precisamente con una resolución de la propia OEA.

Entre las resoluciones aprobadas en el encuentro de Santa Cruz, se plantea el cambio de todos los vocales del TSE para garantizar hacia adelante el respeto a la CPE y la regulación democrática de procesos electorales sin ninguna intervención "manipulada" por el Gobierno a través de funcionarios que han perdido legitimidad. 

En los hechos el encuentro de partidos y cívicos, sirvió para establecer una realidad, la misma que lamentablemente defrauda la esperanza ciudadana y muestra que son más fuertes los intereses personales que los anhelos ciudadanos. En materia política, es muy poco lo que se puede cambiar mientras prevalezcan acciones egoístas y ridículas intenciones de unidad.