El jueves se había asegurado que Gonzalo Barrientos había sido elegido por dos tercios de la bancada opositora; sin embargo, hoy salió a la luz la división de los demócratas. Mientras una parte apoya a Barrientos, una segunda fracción vota por el diputado Norman Lazarte (Tarija).
“La persecución, las amenazas, el obligar sobre todo a las diputadas para que retiren su firma para apoyar a (Gonzalo) Barrientos son prácticas de la política que deben desterrarse. El número de firmas ya no cuenta cuando obligan a apoyar a uno u otro bajo la decisión de “El Bolas” (Murillo) y de Ortiz en el Senado. Las decisiones no las toman los diputados, se la imponen los dos senadores y sus esbirros que actúan bajo su mando”, denunció Costa.
La legisladora afirmó que “no apoyará” a Barrientos como jefe de bancada de UD, porque tiene denuncias por su participación en los hechos luctuosos de Amayapampa y Capasirca, en 1996.
 Por su parte, la diputada San Martín respaldó la denuncia de Costa, al asegurar que la elección de Barrientos, como jefe de bancada, fue por presiones que llegan desde el Senado.
“Determinamos apoyar a Lazarte porque representa renovación, integridad y ética, entiendo que muchos colegas que nos apoyan han sufrido presiones y amenazas para retirar su voto y me da pena, sé que han estado presionados y entiendo que muchos no tienen la libre disposición de su criterio para poder votar por quien mejor les parezca, sino porque les ordenan desde el Senado”, explicó
Al respecto, la presidenta de la Cámara de Diputados, Gabriela Montaño, dijo que se investigarán los hechos denunciados y aseguró que no permitirán “acoso político contra las mujeres, ni de extorsión al interior de la Cámara de Diputados”.   
“Investigaremos todos los hechos irregulares y pedimos que no tengan miedo a denunciar”, complementó.