Las elecciones primarias del 27 de enero se desarrollan en medio de una disputa política intensa, entre la continuidad del Proceso de Cambio y los intentos restauradores de la derecha boliviana. Esta disputa política será intensa, por lo tanto, se traducirá en una amplia apuesta por la ampliación y profundización de la democracia, de parte de unos, pero a la vez, todo indica, que con acciones de sabotaje de los otros (partidos y organizaciones sociales de oposición), que no creen en la democracia interna y en la democracia como tal.

Utilizan como pretexto la habilitación del presidente Evo, con la sentencia constitucional (084/2017 del Tribunal Constitucional Plurinacional) para las elecciones de octubre.

Tenemos una derecha que no cree plenamente en la democracia, una derecha que cree en la democracia de caricatura impuesta durante 20 años, cuando el pueblo votaba, pero no elegía. Peor no cree en la democracia en la que el pueblo vota, elige, participa y decide.

Ése es el contexto en el que se desarrollarán las primarias y esos son los objetivos de los actores, por un lado, para profundizar y garantizar el Proceso de Cambio y demostrar que el MAS-IPSP es la principal fuerza del país, y los otros, con acciones de sabotaje y de violencia.

En ese panorama, ¿qué tipo de acciones más les queda por desarrollar a los partidos de la oposición?
La oposición seguirá desarrollando, a mi juicio, la estrategia del doble carril, es decir, por un lado acciones de hecho con protestas, huelgas e intentos de paro que hasta ahora no funcionaron, e incluso me atrevo a decir con acciones violentas como las que tuvimos el 6 y 11 de diciembre (de 2018, con quema de las instalaciones del Tribunal Electoral Departamental de Santa Cruz). Es un asunto inevitable; aunque no planifiquen, el desenlace será ése porque están con discursos incendiarios, están con discursos antidemocráticos, están con discursos que convocan a la violencia. Hay algunos que se creen el Bolsonaro boliviano (presidente de Brasil), como el señor Víctor Hugo Cárdenas, ése es un carril tratando de evitar las primarias. Segundo, desarrollarán exactamente lo mismo para evitar las elecciones de octubre. Hay que estar preparados para eso.

El tema no son las primarias, ése es el pretexto, la causa de fondo es luchar por la continuidad del Proceso de Cambio porque tratarán de evitar las elecciones de octubre o evitar que Evo Morales aparezca registrado en la papeleta.

Para ellos (la oposición), la única manera para que Evo Morales no aparezca en la papeleta es con convulsión social, es inestabilidad económica y política.

¿Tienen la fuerza para hacer eso?, es la pregunta. La respuesta es no. No tienen la fuerza porque hay un amplio sector, una inmensa mayoría que respalda el Proceso de Cambio.

No tienen fuerza, ¿pero a través de las redes sociales podrán crear una influencia en la población para que vuelque su voto a favor de ellos?
Las redes sociales serán parte de la pelea, de la lucha. Siempre digo que hay que tener cuidado en creer que todo ha terminado; es igual que una guerra, uno puede bombardear, puede tener supremacía aérea, pero para ganar una guerra hay que tener control territorial, y ellos (oposición) no solamente van a desarrollar acciones con sus mentiras sistemáticamente construidas y difundidas con el objetivo de confundir a la gente, sino que van a ser acciones de hecho. No estoy diciendo que no tienen fuerza, lo que digo es que no tienen la fuerza suficiente como para ganar, porque voltear que Evo Morales sea candidato significa voltear al Gobierno, significa tener una fuerza superior a la del Gobierno, a las del MAS-IPSP y de los gobiernos sociales. Esa fuerza no la tienen, lo que no implica que no tengan fuerza porque hay una derecha que está organizada, que confluye en los hechos, converge para hacer acciones. 

Del país irán a pedir auxilio a la comunidad internacional, que será otro de los frentes, con los que se tratará de desacreditar las elecciones primarias, pero también las elecciones de octubre. Ellos pueden hacer campaña internacional en la OEA, acciones violentas en el país, pero no tienen la suficiente fuerza como para convertir todo eso en una victoria sobre el Gobierno, los movimientos sociales y sobre el MAS-IPSP.

¿A qué atribuye los sucesivos fracasos de la oposición para evitar la candidatura de Evo Morales?
Es que no tienen el aparato, quieren sabotear las primarias, es decir, quieren sabotearse a sí mismos porque en realidad es el temor de ponerse en evidencia de que representan a partidos minúsculos. En el registro de militantes ha quedado claro que la fuerza política más grande y organizada es el MAS-IPSP y por ello no quieren poner en evidencia su debilidad, por eso dicen que no harán campaña, y otros incluso que no votarán todos sus militantes porque no tienen la fuerza organizativa para que voten todos sus seguidores.

¿Cuál es la propuesta principal que tiene el MAS-IPSP para encarar las primarias y luego las elecciones generales de octubre?
Hay un proceso que objetivamente ha demostrado lo que se ha hecho. Con la fuerza que tiene el MAS-IPSP, el ejemplo moral y político de su Presidente, de su gobierno y del pueblo se construyó una Bolivia que no la teníamos en el pasado.

¿Cuál es la base de esa construcción?
Los avances que se lograron en estos 12 años, tiempo en el que se hicieron cosas que no se realizaron en el pasado. Este país es otro, es distinto del que teníamos, no en el simple formalismo, sino a lo largo de toda nuestra historia. Por lo tanto, son los hechos, el ejemplo político y moral de Evo Morales y el pueblo para garantizar la soberanía del Proceso de Cambio.

¿Las primarias servirán al MAS-IPSP para fortalecerse?
Lo que tiene que hacerse en este tipo previo a las elecciones primarias es un precalentamiento organizativo, político, ideológico de los movimientos sociales, de los militantes del MAS-IPSP para la segunda y definitiva etapa que se librará entre enero y octubre, y ése será en el campo de las ideas, en el campo de las propuestas, pero también en el campo del control territorial y las redes sociales.

¿Carlos Mesa y Óscar Ortiz tendrán la capacidad de llegar a la gente en las distintas regiones del país?
No. Está demostrado hasta por el tipo de partidos que son, se trata de organizaciones políticas urbanas, deben conquistar a uno u otro individualmente de áreas intermedias, en el área rural, pero es evidente que el MAS-IPSP es una hegemonía, es la única organización realmente nacional porque tiene un líder nacional.