Hace un par de días atrás, Ortiz refirió que el Gobierno actúa de manera irresponsable cuando endeuda al país con inversiones que no generan utilidades y que se están convirtiendo en elefantes blancos.

Alarcón indicó que se trata de un análisis equivocado “este es uno de los programas exitoso que ha llegado a los municipios más alejados del país. A los 339 municipios de Bolivia con diferentes proyectos. Ha ejecutado mediante los gremios, mediante los movimientos sociales”, señaló. De esta manera, la AMT sacó un pronunciamiento repudiando las declaraciones del senador y pidiendo al Gobierno que continúe y duplique los recursos para que se sigan ejecutando los proyectos.

De acuerdo con el Presupuesto General del Estado (PGE) 2019, en el presupuesto institucional por categoría programática y grupo de gasto se contempla la implementación de proyectos multisectoriales de 14 millones de bolivianos y, para la gestión de proyectos especiales, otros 14 millones de bolivianos. Asimismo, se contempla transferencias público privadas de la Unidad de Proyectos Especiales (UPRE) por más de 51 millones de bolivianos, que hacen algo más de 79 millones de bolivianos. Sin embargo, el grueso de los recursos económicos en lo que refiere a fuente de financiamiento y organismo financiador se contempla en el capítulo de transferencias y subvenciones que establece un presupuesto de 686 millones de bolivianos para el programa “Bolivia Cambia, Evo cumple”.

Por otro lado, el presidente del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), José Antonio Revilla, comprometió para este año la reducción de la cantidad de causas en el Órgano Judicial, consolidar la informatización del servicio judicial y una mayor coordinación con la justicia indígena originaria campesina que consideró una deuda pendiente; aunque sorprendió estrellándose contra la prensa y pidiendo ser parte de este programa para contar con proyectos de infraestructura.