El candidato por la alianza Comunidad Ciudadana, el ex presidente Carlos Mesa, escribió en Twitter que el Gobierno de Morales vulnera la Constitución al posesionar altos mandos "completamente sometidos y al servicio del presidente y su partido".

"Esta práctica inaceptable se acabará pronto", manifestó y anticipó que el MAS sufrirá una derrota electoral y dejará el Gobierno tras los comicios primarios y presidenciales que vivirá el país en 2019.

Según Mesa, el Gobierno de Morales vulnera los artículos 245 y 251 de la Constitución boliviana que expresan que tanto el Ejército como la Policía no realizan ni participan en acciones político-partidarias.

Otro de los candidatos a la Presidencia para los comicios de 2019, la principal carta de la alianza "Bolivia dice No", Óscar Ortiz, remarcó en Twitter que las Fuerzas Armadas no se deben al MAS ni a su jefe.

"Le deben obediencia al Presidente de la República quien sólo puede ejercer su autoridad en el marco de la Constitución, no se deben al partido oficialista ni a su jefe", escribió el opositor.

Ortiz recordó en su mensaje que el Jefe de Estado en Bolivia es Capitán General de las Fuerzas Armadas y que le deben obediencia en virtud de este mandato constitucional, pero no por su adscripción política.

El lunes el Presidente posesionó a nuevos comandantes de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, y de la Policía Nacional, Rómulo Luis Delgado, quienes en sus discursos y en declaraciones a la prensa se mostraron afines al proceso de cambio que lidera Morales.

Kaliman, al ser consultado si es un soldado de ese proceso, como se denomina el Gobierno de Morales, respondió que sí y que "no sólo el comandante en jefe, sino todos los militares somos partes de todos los cambios positivos que tiene el Estado".

Delgado expresó que son "la Policía del cambio".

Morales dijo ayer que ahora los altos rangos militares, como generales y almirantes, piden apoyo a los movimientos sociales para lograr ascensos y convertirse en comandantes.