“Cerca de 28 millones de bolivianos, el pueblo está azorado”, declaró el dirigente Roberto Márquez Córdoba al cuestionar el gran movimiento de dinero que se prevé para que los militantes de partidos digan que son sus candidatos cuando ellos mismos ya los nombraron.
Este dispendio de recursos es el reflejo de una actitud dictatorial, que seguramente busca validar la postulación de Evo Morales “cuando es un pisoteador de la Constitución, no debe olvidar que fue el primero en manipular para aprobar esta Constitución, hecha a su medida”, cuestionó.
Cuando esta Constitución no le gustó comenzó a pisotearla, tirarla al cesto, al carro basurero, “hoy en Bolivia ya no hay Constitución, éste es un Estado de facto, tenemos un gobierno de facto, todos los Poderes están cooptados”, enfatizó.
“La declaración de la señora de pollera, presidenta del Tribunal Electoral, deja mucho que desear, es una muestra de que es un maniquí subordinado al Poder central ni siquiera al poder central, a dos personas, Morales y García, candidatos del MAS, inconstitucionales”, criticó.