Medio: Correo del Sur
Fecha de la publicación: miércoles 19 de diciembre de 2018
Categoría: Debate sobre las democracias
Subcategoría: Repostulación presidencial / 21F
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Al igual que sucede en el interior del país, los pedidos de respeto a los resultados del referéndum del 21 de febrero de 2016 y el rechazo a la habilitación del binomio Evo-Álvaro del Movimiento Al Socialismo (MAS) se reflejan en huelgas de hambre en la Capital.
“No podemos ser indiferentes a los colegas cívicos”, con esa frase, el presidente del Comité Cívico de las Provincias (CIDEPRO), Roberto Balderas, estableció ayer el segundo piquete de huelga junto con Mario Salazar, en el Concejo, a la espera de que se sumen más personas.
El también vicepresidente del Comité Cívico de Intereses de Chuquisaca (CODEINCA) resaltó que lleva adelante la protesta de forma personal, aunque reclamó la ausencia de otros líderes cívicos.
El titular de CODEINCA, Rodrigo Echalar, aludido por Balderas, recordó que la última asamblea de instituciones resolvió que la “lucha del 21F está en decadencia en producto que se ha contaminado con la presencia de la derecha”, por el fracaso de huelgas o paros es inminente.
“Hemos anticipado que el realizar una huelga de hambre o un paro cívico indefinido no tiene las consecuencias adecuadas para prosperar y que si fracasa va a terminar de potenciar al gobierno, que se va a sentir fortalecido ante el fracaso de la oposición”, señaló Echalar, aclarando que CODEINCA respeta cualquier manifestación personal como la de Balderas o de las plataformas ciudadanas Juventud Cívica Chuquisaqueñista y Jóvenes Patriotas.
El piquete de huelga, instalado en la plaza 25 de Mayo, sumó ayer a dos personas, con lo que ya van cinco, señaló Jhonny Medrano, uno de los huelguistas.
“UNA BURLA”
El presidente de la Brigada Parlamentaria de Chuquisaca, Elmar Callejas, no se ahorró críticas contra la huelga de hambre y defendió la legalidad de la repostulación de Morales.
“Nosotros decíamos que las huelgas eran hasta las últimas consecuencias, hoy en día parecen burlas, hasta que se acaben las baterías de sus celulares. Son huelgas de Facebook”, criticó el diputado oficialista, al señalar que los huelguistas son “pre candidatos de alguna tienda política” y que buscan “asegurarse un curul”.