Tras el pronunciamiento similar de la Unión Europea (UE) y Estados Unidos, que pidieron a Bolivia respetar la Constitución Política del Estado (CPE) y al voto soberano, el analista Carlos Börth aseguró que debe preocupar tales demandas, porque el aislamiento internacional al régimen de Evo Morales va en aumento dada la semejanza política con Venezuela.

En tanto, el canciller Diego Pary afirmó que el Gobierno boliviano no acepta la intervención de otros países en temas internos.

El fin de semana, el Departamento de Estado de Estados Unidos pidió a Bolivia, mediante un comunicado, el respeto a la Constitución Política del Estado y a la voluntad popular.

“Estados Unidos apoya una democracia saludable en Bolivia que respete la Constitución de Bolivia y la voluntad del pueblo boliviano”, señala la nota de prensa difundida el domingo por el portavoz adjunto del Departamento de Estado de ese país, Robert Palladino.

Asimismo, días antes, el viernes 14 de diciembre, la Unión Europea (UE), a través de su portavoz para Asuntos Externos, alertó que en Bolivia no se conduce a elecciones en “condiciones justas y equilibradas”, debido a las acusaciones y amenazas contra el Tribunal Supremo Electoral (TSE).

Carlos Bort manifestó que el pronunciamiento de los 20 expresidentes del grupo IDEA, la UE y EEUU, así como otras instancias, respecto al retroceso de la democracia boliviana, son reflejo de la situación interna que vive el país, resultado de la cuarta habilitación del binomio Morales – García.

“El aislamiento internacional del régimen de Evo Morales está en aumento, aproximándonos a una situación semejante en lo político a Venezuela y Nicaragua, lo que debe preocuparnos a todos”, dijo.

Ponderó que en el terreno económico estamos lejos de Venezuela, porque si se desatara cualquier desequilibrio macroeconómico el aislamiento puede adoptar ribetes preocupantes ya que nos impediría acceder a respaldo internacional para afrontar la crisis.

El canciller Diego Pary, recordó que, de acuerdo con el convenio marco entre Estados Unidos y Bolivia, ambos países se comprometieron a abstenerse de intervenir en asuntos internos de cada país, por lo que aseguró: “No aceptamos la intervención de otros países para referirse a los temas que le interesan a los bolivianos y las bolivianas”.

Consultado por el pronunciamiento de la UE, Pary dijo que ya se conversó con ellos y se dejó el tema “absolutamente claro”.

A su turno el diputado de Unidad Demócrata (UD) Gonzalo Barrientos dijo que el pronunciamiento de la comunidad internacional está preocupada por la semejanza de Bolivia con Venezuela.

“La imagen que tenemos ahora es que no se respeta la CPE porque se vulnera los derechos constitucionales y estamos igual que Venezuela. En el futuro puede generar decisiones que va a afectar al pueblo como ocurre en Venezuela”, explicó.