“Vemos con preocupación cómo la situación en Venezuela, Bolivia y Nicaragua ha empeorado. Cómo Bolivia transita aceleradamente hacia la consolidación de un sistema no democrático, y cómo los crímenes de lesa humanidad, los más graves, los que atentan contra la humanidad en su conjunto, se han cometido masivamente en Nicaragua y Venezuela”, dice un pronunciamiento del CASLA.

Sobre Bolivia, indica que Morales y un sistema judicial y electoral implantado a su medida desconocen el artículo 168 de la Constitución Política del Estado, que establece que el Presidente sólo podrá ser reelegido por una vez de manera continua.

“En el referendo del año 2016, los ciudadanos bolivianos le dijeron No a las pretensiones de Morales de reelegirse, lo que ha provocado ilegítimas justificaciones para extender su mandato, excusándose en que la reelección es un ‘derecho humano’, interpretación manipulada que le han dado a una sentencia emitida por la CIDH (Comisión Interamericana de Derechos Humanos) y bajo este precepto el Tribunal Supremo Electoral (TSE) habilitó a Morales (...)”, analiza el instituto.

Según el CASLA, miles de bolivianos salieron a las calles a protestar, movilizándose desde el interior del país y demostrando su descontento, tanto por la gestión de Morales como por el desconocimiento de la Constitución y el mandato dado en el referéndum del 21 de febrero de 2016 (21F).

“La alternancia en el poder fortalece los sistemas democráticos. Cuando cualquier mandatario pretende eternizarse en el mismo, violando la norma, utilizando los poderes públicos como herramientas para este objetivo, y reprimiendo e intimidando y persiguiendo a quien se le opone, no puede ser llamado demócrata”, sentencia.

También hizo un llamado a todos los países democráticos del mundo a no cesar en las acciones dirigidas a que los pueblos de Bolivia, Nicaragua y Venezuela puedan vivir en democracia y libertad.