Cárdenas dijo que se puso en contacto con varios de los candidatos a través de cartas o conversaciones telefónicas y se logró la primera coincidencia, que es la renuncia de los siete vocales electorales, pero que existen otros puntos de la propuesta que serán concertados en una cumbre de candidatos opositores.

Paralelamente, Unidad Nacional (UN), que no será parte de las primarias, emitió un comunicado en el que exhorta a los partidos pequeños a deponer sus candidaturas y, de ese modo, contribuir al denominado ‘movimiento de resistencia’, que promoverá las protestas y tendrá una dirección diversa, unitaria, plural y pacífica.

Pero el candidato Leopoldo Chui, de Pan-Bol, informó que él no fue contactado por nadie, por tanto desconoce las propuestas que hacen Cárdenas, por un lado, y UN, por el otro.

Los vocales del TSE evitaron dar explicaciones sobre estas cifras, porque se publicaron 2,1 millones de nombres de militantes, pero esa cifra se redujo a 1,7 millones y no se sabe qué pasó con 400.000 registros de militantes porque el número de ciudadanos que presentaron certificados solo alcanza a 53.000, según el cálculo preliminar que realizó el vicepresidente del ente electoral, Antonio Costas.

Ayer, el MAS, que supuestamente tenía 1,2 millones, registró 991.093 militantes; mientras que el MTS, de Félix Patzi, presentó en septiembre 210.000 firmas y acabó con 95.391. Demócratas, que dijo que tenía 350.000 militantes, ayer recibió el certificado de 223.558 adeptos. Solo el MAS y Demócratas lograron más de 200.000 militantes.