Medio: La Estrella del Oriente
Fecha de la publicación: lunes 03 de diciembre de 2018
Categoría: Representación Política
Subcategoría: Renuncias y cambios de autoridades electas
Dirección Web: Visitar Sitio Web
Lead
Contenido
Bazán fue suspendido del cargo en mayo de este año, después de ser imputado por delitos de corrupción en la compra de mochilas escolares. Está con detención domiciliaria e intentó retomar su puesto en noviembre, pero no se lo permitieron.
Señaló que la primera razón para renunciar al cargo es evitar que la ciudadanía orureña se mantenga con incertidumbre. Dijo que existen “peleas aquí y peleas allá”, mientras la gente se pregunta qué pasa con el desarrollo de su ciudad.
El segundo motivo es que pretende demostrar a la justicia y a toda Bolivia que obstaculizará la investigación del caso mochilas. Recordó que lo acusaron de querer volver a la Alcaldía para destruir pruebas, pero negó que esa sea su intención.
Como tercera razón mencionó al ámbito personal. Bazán dijo que prefiere no arriesgar su salud y la de su familia.
Agradeció al pueblo de Oruro por haberlo respaldado como Alcalde en cuatro gestiones. Su última elección fue en las elecciones de 2015.
Bazán fue enviado a la cárcel en mayo de este año, acusado de comprar mochilas hechas en China mediante una modalidad que le obligaba a adquirirlas de productores nacionales. El Concejo Municipal nombró a Hilaria Sejas como Alcaldesa suplente.
Salió de la cárcel luego de que en julio la justicia le otorgó medidas sustantivas a la detención preventiva, entre ellas arresto domiciliario. Luego tramitó que se le autorice salidas para ir a trabajar.
El 14 de noviembre se presentó en la Alcaldía para retomar el cargo, pero se encontró con las puertas cerradas del despacho edil. Lamentó que Sejas no haya aceptado no haya tenido ni siquiera la gentileza de recibirlo, por lo cual se convenció que no hay condiciones mínimas para su regreso y decidió alejarse.