El arzobispo de Santa Cruz, monseñor Sergio Gualberti, durante su homilía de ayer se refirió a los recientes hechos de linchamientos que se registraron en el país, a las denuncias de registros de militancias irregulares, y al asentamiento de tierras fiscales forestales, entre otros temas. Pidió a los bolivianos repensar el momento que está atravesando la sociedad y preguntarnos “¿qué país queremos construir y con cuáles valores”. Aseguró que “acoger a Cristo ayuda a nuestra sociedad a encontrar el rumbo hacia una convivencia justa y en paz, en particular en este tiempo de grave descomposición y de confrontación social”. “Como muestra, unos hechos en estos días: el acto criminal y gravísimo pecado de los linchamientos, resultado de la cobardía de las masas, de la impunidad y de la ausencia de la justicia y del Estado; la improvisación y la vulneración del padrón electoral en las elecciones primarias, que genera desconfianza en el sistema electoral”, indicó Gualberti. También se refirió al reciente conflicto entre municipios y la Gobernación de Santa Cruz, lo que generó un enfrentamiento en el Gobierno departamental. Gualberti expresó su preocupación por la multiplicación de los casos de machismo en el país. “Nos unimos al clamor que se eleve en este Día Mundial de la No Violencia pidiendo que se eduque a las nuevas generaciones, al respeto de la mujer en igual dignidad y derecho y termine con la discriminación y toda violencia física sexual y sicológica”, concluyó.