“Nosotros queríamos mostrar el estado actual del registro de militantes de las diferentes organizaciones políticas, proveyendo la posibilidad de reclamo que tienen los ciudadanos”, expresó Idelfonso Mamani, vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Además, tanto autoridades electorales como de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP), Gabriela Montaño y Milton Barón, afirmaron que el registro de militantes es diferente y no afecta al padrón electoral biométrico, que fue reconocido por la Organización de los Estados Americanos (OEA).
El organismo hemisférico, después de una auditoría, en su informe final entregado al TSE, el 12 de diciembre de 2017, concluyó que “(el padrón boliviano) es un instrumento confiable para la celebración de elecciones”.
En esa ocasión, Rodrigo Morales, coordinador de la Misión de la OEA para la Auditoría del Padrón, afirmó que la consistencia de la base de datos de ciudadanas y ciudadanos habilitados en el padrón alcanza a un 98,9%.
La mira en las primarias
Los presidentes de las cámaras legislativas dijeron que los hechos denunciados no afectan el calendario electoral de las elecciones primarias y los comicios generales de octubre 2019, como plantearon algunos dirigentes de la oposición.
Montaño considera como “una locura” suspender dichos comicios y, más bien, propuso que la oposición, en lugar de pretender meter la basura bajo la alfombra, transparente los datos de su militancia.
El vocal del TSE Idelfonso Mamani, así como el expresidente del TSE Wilfredo Ovando recordaron, por separado, que el registro de militantes es realizado por los partidos en libros entregados por el Tribunal, por lo que los directos responsables (por las anomalías) son las organizaciones políticas.
En la actualidad, el TSE está en período de consolidación del padrón de militantes y el 13 de diciembre, de acuerdo con el calendario electoral de las primarias, entregará la lista de los electores habilitados.
Denunciar a la Fiscalía
Ovando acusó a los partidos por las irregularidades. Dijo que éstos hicieron figurar a personas que no emitieron su voluntad de inscribirse.
“Si la responsabilidad es penal por la falsificación de firmas, hay figuras delictivas; los delitos sólo cometen las personas, no las instituciones. Lo que corresponde es denunciar al Ministerio Público a los posibles autores, cómplices y encubridores, y la investigación determinará responsabilidades”, remarcó.
Para la exautoridad, si hay un porcentaje elevado de irregularidades, “podría disponerse la eliminación de libros”, pero hay una limitante: el reglamente no establece ello.
Guías telefónicas
“Antes, el registro de militantes era un desastre, en su mayoría los militantes que inscribían los partidos políticos eran suplantados. Sacaban directamente datos de las guías telefónicas, así aparecían miles de personas. Recababan el número de carnet de identidad de algún lugar y copiaban, sin el consentimiento de las personas”, aseguró Ovando.
Recordó que en su gestión (2011-2015), cuando las personas tenían que sacar su certificado de no militancia, aparecían inscritas en un partido político y debían tramitar su nulidad o su renuncia.
La exautoridad señaló que en el proceso de inscripción de militantes rige el principio constitucional de la presunción de buena fe, y “cuando una (organización política) presenta nombres inscritos lo hace de buena fe”.
“En el pasado se asumía como correcto (el registro de militantes), ahora lo bueno es que se está transparentando, es la diferencia, se posibilita que cualquier persona ingrese al sistema para averiguar. Los partidos tendrán que tomar medidas para evitar estas irregularidades”, apuntó.
El padrón biométrico, subrayó, en un 100% es administrado por el Órgano Electoral, mientras que el registro de militantes es de las organizaciones políticas que se encargan de capturar los datos.
La Ley de Organizaciones Políticas establece que el TSE “conformará un padrón biométrico único de militantes de las organizaciones políticas”, pero esto será paulatino.
El vocal Mamani reconoció que deben efectuar ese trabajo; sin embargo, indicó que no se tiene plazos, y que previamente tratarán el tema con los partidos políticos.
¿Qué pasó con SOL.bo?
El TSE rechazó en septiembre otorgar la personalidad jurídica como partido político nacional a SOL.bo, del alcalde de La Paz, Luis Revilla, porque de los 131.970 registros cotejados con el padrón electoral biométrico, 34.260 tenían observaciones no subsanables (inclusión de fallecidos).
Revilla requería de 100.228 registros válidos para lograr la personería, pero sólo se contabilizaron 68.728 válidos, el resto fue observado.
Ante esa situación, y para no quedar fuera de las primarias ni de las nacionales 2019, el edil firmó alianza con el Frente Revolucionario de Izquierda (FRI), que postula al expresidente Carlos Mesa.