Precisó que la ministra de Culturas, Wilma Alanoca, está como militante del Movimiento Por la Soberanía (MPS) y el ministro de Trabajo, Héctor Hinojosa, está en el registro del Movimiento Demócrata Social (Demócratas). Respecto a los parlamentarios, señaló que el asambleísta departamental Gustavo Torrico figura en el Frente de Izquierda Revolucionario (FRI), el diputado Gualberto Rivas está en la agrupación Fuerza y Esperanza, y el otro diputado Édgar Montaño aparece en el Partido de Acción Nacional Boliviano (PAN-BOL).
Con esos argumentos, Barón sostuvo que el MAS es el más afectado por los registros falsos, puesto que otros partidos fraguaron inscripciones y anotaron a gente del Movimiento al Socialismo.  
“Los más afectados por estos hechos de falsificación de militancia somos precisamente el Movimiento al Socialismo, dado que el MAS es la primera fuerza política del país, y muchos de nuestros militantes aparecen en otras organizaciones político partidarias. Son los otros partidos quienes han fraguado la inscripción de nuestros militantes”, dijo el presidente del Senado.
Barón destacó la iniciativa de publicar los registros de militantes, porque considerar que ayudará a que el padrón de los partidos sea transparentado y saneado, puesto que las personas quienes se sientan afectadas pueden pedir anular su inscripción o renunciar.     
La presidenta de Diputados, Gabriela Montaño, acotó que de no haberse publicado los registros, habría personas que nunca se habrían enterado el uso de sus datos. Puso como ejemplo que Gustavo Torrico habría ido a votar en las Primarias del MAS, y se hubiese encontrado con que no estaba anotado.

Abogado presenta
denuncia en Fiscalía
El abogado Rolando Ramos fue la primera persona que decidió presentar una denuncia penal en Cochabamba porque fue inscrito como militante del Partido Demócrata Cristiano (PDC) y figura en las listas de ese partido sin su consentimiento. La denuncia aún no tiene establecido a los presuntos autores del ilícito, tipificado como falsedad material, ideológica y uso de instrumento falsificado, pero Ramos explicó que establecerá los posibles autores de lo que él cree fue suplantación de su identidad, una vez que el Tribunal Departamental Electoral (TDE) de Cochabamba identifique a los delegados del PDC en ese departamento, así como los responsables del libro donde presuntamente se inscribió, ya que para hacer efectivo su registro de militante necesariamente alguien falsificó su firma y huella dactilar.
“Lastimosamente esto ocurrió porque los partidos han hecho lo que sea para cumplir los requisitos y obtener su personería jurídica (…). En los próximos días me van a dar los requerimientos para que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) pueda certificar y extender las fotocopias del registro de la inscripción. Ahí voy a pedir establecer con precisión las características de la firma que se habría impreso suplantando a mi persona”, indicó a medios estatales.
Ramos afirmó que llegará con el proceso hasta el final y deslindó de responsabilidad al Tribunal Supremo Electoral (TSE) o a los entes departamentales, porque esta institución no fue la que inscribió a los militantes, sino que fueron los mismos partidos y son estas entidades las que cometieron los ilícitos.
La polémica se desató desde el lunes, cuando el Tribunal Supremo Electoral habilitó las consultas de la población para ver si los ciudadanos están o no registrados como militante de cara a las inéditas elecciones primarias de enero de 2019. Se descubrió que muchos ciudadanos están inscritos en diferentes organizaciones políticas sin su consentimiento ni conocimiento.
El TSE informó que más de 500 solicitudes de anulación, renuncia o rectificación de militancia política fueron presentadas hasta la fecha.
Manifestó que las personas afectadas por el uso de sus datos podrían iniciar procesos legales del tipo penal, más aún cuando se trata de un hecho de falsificación.