Un centenar de personas afectadas denunciaron ayer a los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) por el caso de los registros ilegales de militantes. El activista Iván Arias, el diputado Rafael Quispe y el abogado Omar Durán fueron quienes presentaron el memorial.
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Los afectados piden al Ministerio Público “garantías de la privacidad de nuestros datos”, para que esa información “no sea usada para actos dolosos”.
El activista Iván Arias fue uno de los que interpusieron la denuncia ante la Fiscalía, ayer. Foto:APG
Un centenar de personas afectadas denunciaron ayer a los vocales del Tribunal Supremo Electoral (TSE) por el caso de los registros ilegales de militantes. El activista Iván Arias, el diputado Rafael Quispe y el abogado Omar Durán fueron quienes presentaron el memorial.
“Hoy día hemos presentado una centena de personas, de las más de 600 que nos han llamado, y vamos a hacer una segunda tongada para la próxima semana, porque cada rato se presenta más y más gente”, afirmó Arias, tras interponer la denuncia ante el Ministerio Público.
Los presuntos delitos electorales que denuncian son: falsificación de documentos o uso de documentos falsificados, manipulación informática, alteración o modificación del padrón electoral, tipificados en la Ley 026; y falsedad material y falsedad ideológica, establecidos en el Código Penal.
Los demandados
La denuncia es contra María Eugenia Choque, presidenta del TSE; Antonio Costas, vicepresidente del organismo electoral; y contra los vocales Lucy Cruz Villca, Idelfonso Mamani y Dunia Sandoval.
“El tribunal electoral una vez que recibe los datos es depositario de los datos (...). El tribunal electoral antes de sacar, bajo un supuesto hito de transparencia, genera confusión y eso tiene dudas sobre el tribunal electoral sobre lo que van a hacer con mis datos”, comentó Arias.
El activista dijo que “hay gente que está manipulando”, y que por lo tanto “estamos pidiendo a la Fiscalía que investigue y nos dé garantías de la privacidad de nuestros datos, que nuestros datos no sean usados para actos dolosos, que no sean usados de una forma como parece que está ocurriendo”.
