La diputada suplente Erika Justiniano del Partido Demócrata Cristiano (PDC) perdió su curul porque registra 21 faltas en el detalle de licencias, bajas médicas y licencias en Comisión de la primera Secretaria de la Cámara de Diputados.

La planilla señaló: la diputada Justiniano Negrete Erika (suplente) “tiene 13 faltas que se reportó hasta el mes de julio, pero hasta la fecha ya tiene 21 faltas conforme al artículo 157 de la Constitución Política del Estado y el artículo 28 del Reglamento General de la Cámara de Diputados, el cual se encuentra en la Comisión de Ética”.

Y según la Constitución Política del Estado (CPE) en su capítulo primero de composición y atribuciones de la Asamblea Legislativa en el artículo 157 indica que “el mandato del asambleísta se pierde por (…) abandono injustificado de sus funciones por más de seis días de trabajo continuos y once discontinuos en el año, calificados de acuerdo a Reglamento”.

Entonces el reglamento de la Cámara de Diputados suscribe en el capítulo tres sobre pérdida y suspensión del mandato artículo 28, específicamente, pérdida de mandato de los Diputados “h) Abandono injustificado por más de seis días continuos de trabajo y once días discontinuos al año”.

Entonces, según el mismo reglamento señala que “II. La Cámara deberá resolver la pérdida del mandato, previo informe de la Comisión de Ética, por dos tercios de votos” de acuerdo al artículo 150 de la CPE inciso f) que señala “se hará efectiva al ser de conocimiento del Pleno de la Cámara de Diputados y se notificará con la Resolución Camaral al Órgano Electoral”.

Según fuentes a las que accedió EL DIARIO, la situación de la diputada suplente del PDC, Erika Justiniano Negrete, tiene un matiz bastante sui generis, porque la gestión 2017 renunció y el pleno de la Cámara de Diputados aceptó e hizo resolución aprobatoria en al que indicaba la devolución de sus activos.

Pero después de algún tiempo el plenario de la Asamblea consideró otra vez su retorno de la diputada Justiniano, y resolvió revocar la Resolución de renuncia por la mayoría del plenario con los dos tercios del plenario, con el argumento de que la legisladora había sufrido acoso y violencia política.

Pero según la fuente que informó a EL DIARIO la denuncia de acoso y violencia política, no fue hecha por Justiniano sino que otra persona había pretendido suplantar y sentar la denuncia en el Tribunal Supremo Electoral (TSE), pero al momento de exigirle su cedula de identidad, esta persona huyó.

Nuestro medio buscó a la diputada, desde hace seis meses, para tener su versión pero nunca atendió, su número de celular asignado por la Asamblea Legislativa, al que más bien respondió otro legislador y en las semanas que fue habilitada como suplente, tampoco se la encontraba.