Las dos acefalías que se registran en el TSE no tienen por qué paralizar el proceso electoral de las primarias, manifestó ayer el vicepresidente de la Cámara de Diputados, Lino Cárdenas.

“No hay ningún problema en cuanto al desarrollo de las elecciones primarias, ya que se tiene el quórum reglamentario con los cinco vocales que quedan, incluso podría funcionar con cuatro”, opinó Cárdenas.

Indicó que es normal que en una instancia como el Tribunal Supremo Electoral (TSE) no comulguen entre todos y que haya discrepancias.
Para el diputado de Unidad Nacional (UN) Amílcar Barral, la renuncia de Uriona es una muestra de la crisis institucional.

Cárdenas replicó que no se puede hablar de crisis dentro del TSE, sino de visiones distintas y toma de decisiones por mayoría, “para la oposición hasta hace unos días todos los vocales eran oficialistas”.

Además, lamentó que Carlos Mesa, candidato del FRI, diga que la renuncia podría producir una crisis de Estado. “Son extremos que la oposición trata de magnificar”, advirtió.

Mientras que el diputado Víctor Gutiérrez Flores (UD) considera que la sala plena debe reunirse para elegir a quien presidirá el TSE y atenderá los asuntos administrativos, pero “las elecciones (del 27 de enero de 2019) no pueden detenerse”.

En esos comicios, los partidos elegirán a los que serán candidatos a la presidencia.