La presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Katia Uriona Gamarra, presentó esta mañana su renuncia irrevocable a su cargo de vocal nacional, arguyendo que “en esta etapa” la Sala Plena llegó a un “estancamiento en la toma de decisiones, referida a temas fundamentales”.

Uriona remitió su renuncia al TSE ante la Asamblea Legislativa Plurinacional, en la que detalla que se aleja de su cargo debido a que se encuentra “impedida de seguir asumiendo la representación y conducción de esta instancia” porque “la Sala Plena, instancia colegiada y máxima para la toma de decisiones, ha llegado a una situación de estancamiento en la toma de decisiones referida a temas fundamentales para el resguardo de la institucionalidad y los principios y valores comprometidos por mi persona”.

La ahora ex autoridad fue designada vocal del TSE en julio de 2015 y posteriormente asumió la presidencia de la Sala Plena, cargo que ejerció hasta su renuncia.

El pasado 1 de octubre, el vocal y vicepresidente del TSE, José Luis Exeni, también presentó su renuncia a su cargo, alegando que estaba aquejado por una enfermedad que requería de su plena atención.

El TSE se encuentra en la mira, debido a que se exige su pronunciamiento sobre la repostulación del presidente Evo Morales, que estaría vetada por la Constitución Política del Estado y fue rechazada por el referéndum del 21F, pero que cuenta con el aval de una cuestionada sentencia del Tribunal Constitucional Plurinacional que considera que una restricción en la cantidad de postulaciones al cargo afecta a su derecho a ser electo.