Ha trascendido que los jefes de campaña del MAS serán nueve ministros del gabinete de Evo Morales. La decisión es por demás ilegal porque se supone que el Estado paga los sueldos de los ministros para que hagan gestión.

Pero, eso no es lo más grave. Lo que ocurrirá es que los ministros camuflarán sus gastos electorales con los de gestión y, de esa forma, podrán trasladarse a las regiones y movilizar gente para la campaña, sin que esto implique ningún costo para el MAS.

Ya lo hicieron de esa manera en los actos de proclamación que se desarrollaron el 10 de octubre, cuando los ministros se distribuyeron en los departamentos para organizar y presidir los actos electorales a título de que eran homenajes al Día de la Democracia.

Es ya sabido que en los 13 años de Gobierno, el MAS ha utilizado el aparato estatal para hacer campaña, lo que implica aviones, vehículos, propaganda mediática con las obras y movilización de militantes para inauguración de más obras. Esta vez la acción será más abierta porque los ministros serán los jefes de campaña. El TSE tiene mucho que decir en este tema.