Arce lamentó en días pasados las declaraciones del expresidentes Carlos Mesa y Tuto Quiroga, que por un lado exigen que Chile cumpla el fallo de la Corte La Haya sobre la demanda marítima y por el otro, pidan incumplir la sentencia del TCP sobre la repostulación de autoridades electas.

“Cómo podríamos pedirle a Chile que cumpla un fallo de la Corte Internacional de Justicia si los líderes de la oposición política están internamente pidiendo que se incumpla un fallo del Tribunal Constitucional”, declaró el ministro Arce.

Quiroga sostuvo que los “sicarios del exTCP  prevaricaron al contravenir tres fallos que habían emitido el 2013-15, cuando ratificaron la constitucionalidad de solo dos mandatos presidenciales. Estos sicarios prevaricaron y buscaron anular la voluntad soberana expresada el 21F con su sentencia 084-2017”.

Señaló que solo valen dos comparaciones: la primera que todos los bolivianos exigimos a Chile que cumpla sus reiteradas  promesas marítimas, verbales y escritas del último siglo. Con la misma convicción, le pedimos al Presidente Morales que cumpla y respete sus promesas, sus leyes, la Constitución y la votación del 21F, todas de la última década, indicó.

La segunda es confiar en la Corte de La Haya para el mar, y confiar en la Corte de San José para la democracia boliviana. 

Reiteró su desafío al Presidente Morales de elevar una opinión consultiva a la Corte de San José sobre la reelección. 

Dijo que si cree que la reelección perpetua es un derecho humano protegido por instrumentos de la OEA, pues que disipe las dudas y no se aferre a un prevaricato, y no siga el mal ejemplo de Chile que intentó negar competencia a la justicia internacional.

“Todos los bolivianos vamos a demandar unidos que Chile respete el fallo que dicte la Corte de la Haya el 1 de octubre. Lo que vale para el mar, vale para la democracia, por eso el Presidente Morales debe enviar la consulta sobre  reelección perpetua a la Corte de San José y todos respetaremos su dictamen”, afirmó.

Sostuvo que Bolivia merece vivir en este siglo XXI en el Océano Pacífico con soberanía y en democracia plena sin tiranía ni reelección perpetua. “Mar a cambio de aceptar tiranía que desconozca 21F, es chantaje. Mar con democracia es la verdadera unidad”.