"Él ha sabido ser pobre y los pobres sólo podemos velar por los pobres, no esperemos que los ricos se apiaden de las provincias, de los cantone, de nada. Por eso no se equivoquen, no tienen que apoyar a los partidos de derecha, acá en Capinota todos somos absolutamente vamos a votar para respaldar a nuestro hermano Evo, porque así vamos a progresar mis hermanos, sólo así", dijo.

La unidad educativa que lleva el nombre folklórico tuvo una inversión de más de 7 millones de bolivianos.

Hermosa agradeció a Morales por la escuela y aseveró que con su presidencia Bolivia vive el "nacimiento de una tierra poderosa, grande, como siempre habíamos soñado nosotros".

"Está (Morales) haciendo lo imposible para levantar una tierra que estaba dejada, una de las tierras más atrasadas en el globo terráqueo junto con Haití, pero no, hoy tenemos un pueblo fuerte y una economía muy fuerte", sostuvo.

Hermosa señaló que Brasil y Argentina se están cayendo con sus crisis económicas, pero en Bolivia "seguimos bien parados, gracias a nuestro hermano presidente".

A su turno, Morales manifestó que los Kjarkas son un orgullo y que no faltará gente que intentará desprestigiar. 

"Kjarkas es patrimonio del pueblo boliviano, que sepa la derecha, Kjarkas no sólo es patrimonio del pueblo boliviano, hasta del pueblo latinoamericano", dijo el mandatario, vestido con el poncho característico del grupo folklórico.

Morales recordó a la canción "Bolivia" de los Kjarkas y aseveró que refleja al proceso de cambio. Se despidió arengando a los presentes para gritar "viva" al grupo musical.

Los Kjarkas estuvieron involucrados en una polémica de carácter político, después de que Hermosa calificó a Morales de regalo de Dios y a sus opositores como holgazanes. Entonces, el grupo fue objeto de críticas en redes sociales y se reveló que tenían contratos por cientos de miles de bolivianos con el Gobierno.