“Ayer ha sido una jornada donde se ha develado quiénes están detrás de la derecha boliviana radical, racista y opositora a la revolución del pueblo. Ha llamado la atención esta articulación de fuerzas internacionales políticas vinculadas con el imperio”, declaró a los periodistas en Palacio de Gobierno.

Explicó que por un lado el canciller chileno Heraldo Muñoz se inmiscuye en decisiones políticas que “toma el pueblo boliviano, olvidándose su rol de representante de la diplomacia chilena y por otro lado EEUU que emite un comunicado internacional, involucrándose, metiéndose en una afán injerencista en la política boliviana”.

López sostuvo que lo único que ha pasado es que se han quitado la careta y ahora de frente emiten un criterio político respecto a las decisiones que se “toman democráticamente en Bolivia y se inmiscuyen en un órgano democrático que es el Judicial, que ha tomado una decisión basada en la Constitución y los convenios internacionales”.

Afirmó que el gobierno está viendo cómo se delatan  por vos propia, actores que durante 11 y casi 12 años han venido incentivando, financiando y solventando a la derecha criolla, donde países vecinos como el caso de Chile, expresan un interés que antes no lo tenían, porque a Chile “le importaba un comino la política boliviana”.

Manifestó que la clase política conservadora chilena, no el pueblo porque el pueblo chileno apoya la demanda marítima,  no duerme tranquila desde que Evo Morales es presidente porque tomó el liderazgo por la causa marítima, a diferencia de gobiernos bolivianos manejados por la derecha que durante 100 años dilataron la demanda histórica.