La primera encuesta nacional de intención de voto muestra ‘techos electorales’ discretos. La tendencia se mantiene y refleja una preferencia por las fuerzas alineadas con la oposición.

Si por alguna razón no pudiese votar por el candidato de su preferencia, ¿cuál sería su siguiente opción? Se trata de una pregunta frecuente en las encuestas electorales. Es una consulta que permite a los analistas trazar el techo electoral de cada candidato y, de este modo, proyectar las potencialidades de cada uno ante distintos escenarios. La encuesta de intención de voto elaborada para EL DEBER también apeló a esta misma pregunta. Y los resultados muestran una leve variación sobre la intención de voto inicial. Sí es más notoria la preferencia generalizada hacia las fuerzas opositores como alternativa y un desencanto respecto a las agrupaciones de izquierda.

El pasado miércoles, en el estreno del programa Yo Elijo que se emitió por las plataformas de streaming de EL DEBER, se presentó los resultados de la primera encuesta nacional de intención de voto de EL DEBER. La empresa Spie Consulting SRL realizó el trabajo de campo entre el 7 y el 14 de junio y comprendió 2.500 entrevistas presenciales, cara a cara, en hogares de las áreas urbana y rural de los nueve departamentos del país. Según el diseño estadístico de la encuesta se garantiza un nivel de confianza del 95%, con un margen de error nacional inferior al 2,16%.

Ante esta pregunta, los datos revelan una mejoría en las fuerzas políticas de oposición, mientras que las fuerzas cercanas al oficialismo actual se estancan. En números, tanto Samuel Doria Medina (Alianza Unidad) como Jorge Tuto Quiroga (Alianza Libre), ocupan las primeras posiciones en la encuesta de intención de voto, y crecerían en torno a un 15% en caso de ser el candidato de la unidad. Sin embargo, el tercero en preferencia de voto, Andrónico Rodríguez (Alianza Popular) no lograría ni un 1% de incremento si lograra aglutinar las fuerzas que componen el abanico de izquierda.

¿Qué son los techos electorales?

En la ciencia política se utiliza los términos piso y techo electoral como una forma de conocer los márgenes de un candidato en la votación. El piso electoral es similar al voto duro. Se utiliza el término para identificar a aquellos votantes que tienen una determinación inamovible para apoyar al candidato de su preferencia.

Por techo electoral se considera la votación que pudiera alcanzar un candidato ante ciertas condiciones favorables. Para ello se consulta a los encuestados cuál sería su votación en caso de que ciertos candidatos no participen. De esta forma, se puede identificar quienes optarían por uno u otro en segunda opción. De este modo se logra proyectar posibles votantes que podrían redireccionar su voto hacia este candidato.

Otra pregunta clave que se realiza para determinar el techo electoral interpela a los encuestados sobre por qué candidato no votaría bajo ninguna circunstancia. Esos ‘negativos’ son otra manera de estimar las opciones electorales de un candidato.

Los datos de la encuesta

De modo puntual, Samuel Doria Medina pasaría de los 24,02% a un 39,8% si se presentara en las elecciones como candidato de unidad. Además de los votos obtenidos de manera directa, podría atraer más de la mitad de los votantes cuya preferencia inicial era Tuto Quiroga. Del mismo modo, acapararía buena parte de los votos, tanto de Rodrigo Paz (25.2%) como de Manfred Reyes Villa (28.4%).

Si Jorge Tuto Quiroga postulara como único candidato opositor, obtendría un techo del 37.5% de los votantes. Del mismo modo que se hizo antes, Quiroga sumaría al porcentaje inicial obtenido por él, de 22.1%, casi la mitad de los votos de Samuel (48.4%) y una buena parte de Rodrigo Paz (16.4%) y de Manfred Reyes Villa (30.9%).

En el caso de Manfred Reyes Villa (APB- Sumate), que registró una intención de voto del 9.39%, en un escenario de candidato único como el descrito le permitiría ascender hasta un 17.6%. Algo similar ocurre con Rodrigo Paz Pereira, candidato de PDC, que pasaría del 5.56% inicial a un 8.1%.

El principal candidato de la izquierda, Andrónico Rodríguez, muestra un potencial crecimiento muy reducido. Pasaría del 14.7% que registró en intención de voto a un 15.5% como candidato de unidad en el frente de izquierda. Los votos que arrastraría de Jhonny Fernández, Eva Copa y Eduardo del Castillo no le incrementarían ni e un 1% su umbral.