Durante el IV Encuentro Multipartidario e Interinstitucional por la Democracia, Dunn responsabilizó al Gobierno y al Movimiento al Socialismo (MAS) por permitir que la violencia aumente. Exigió una intervención estatal inmediata para abordar esta situación crítica.

Dunn no considera los incidentes ocurridos en lugares como Llallagua, en Potosí, como simples delitos comunes. Para él, estos son actos de terrorismo que están siendo investigados y financiados. Además, denunció la inacción deliberada del Ejecutivo frente a un clima social que se vuelve cada vez más incontrolable.

Riesgo para la seguridad nacional

El candidato advirtió que no solo está en riesgo el proceso electoral, sino también la seguridad nacional y la vida de los bolivianos. Según su análisis, la división interna del MAS y su deseo de mantener el poder a toda costa están intensificando el descontento social.

Dunn señaló que esta situación ha creado un vacío de liderazgo en momentos críticos. “No se puede gobernar un país cuando se tolera la violencia o se mira hacia otro lado mientras se incendia la casa”, afirmó.

Exigencias de intervención estatal

Ante este preocupante panorama, Dunn exigió una intervención inmediata del Estado. Esto incluye el despliegue de fuerzas conjuntas, la realización de investigaciones transparentes y la creación de una comisión independiente con participación ciudadana.

El candidato recalcó que, si no se actúa con urgencia, el actual Gobierno será recordado como el responsable directo del colapso de la institucionalidad democrática en Bolivia.