El principal dirigente de la institución vecinal, Samuel Mendizábal, mencionó que el reciente cambio del jefe de la Unidad de Defensa al Consumidor, donde Gregorio Pereira, reemplaza al teniente Wilder Alcalá, quien cumplió labores por algo más de dos meses, puede ser una muestra de una especie de ingobernabilidad, ya que a esta nueva designación se suma la de algunos directores y jefes de unidades.

"Estamos preocupados por la posible ingobernabilidad en la Alcaldía, ya que vimos que, en primera instancia, luego del 18 de mayo, se han realizado varios cambios en Secretarías, Unidades y Jefaturas Municipales, por la suspensión de Edgar Bazán, pero en las nuevas designaciones, sorprendentemente ya han surgido varios cambios pese a ser autoridades nuevas, dejando prácticamente nada de trabajo por el poco lapso de tiempo que se les dio para trabajar", manifestó.

Aseveró que si bien toda autoridad nueva, o en el caso de la Alcaldía, una alcaldesa suplente, debe trabajar con gente de su confianza, no augura nada favorable cuando reemplaza a sus principales autoridades constantemente, por lo que solicita que en adelante se permita a las actuales autoridades, cumplir sus labores hasta que Hilaria Sejas finalice su gestión y no perjudicar a los vecinos.

En lo que va de la gestión de Sejas, ya han sido removidos de su cargo dos directores, un secretario municipal, el jefe de Defensa al Consumidor y la retractación en la designación de nueva autoridad de la Empresa Municipal de Aseo Oruro (EMAO), cuando Marco Siles no duró ni 24 horas en el cargo y tuvo que mantenerse en el cargo a quien primero asumía las funciones, César Lazarte.

Al respecto, ya en una pasada oportunidad, el secretario general de la Alcaldía, Juan Carlos Rodríguez, indicó que los cambios se debían a que los funcionarios no aguantaron las presiones sociales y exigencias de la labor pública, pero que no existe inestabilidad en la actual gestión.