Una marcha protagonizada por vecinos del populoso barrio Miguel Castedo y funcionarios municipales terminó con amagues de enfrentamientos contra el movimiento cívico, que inició una vigilia en puertas del Gobierno Municipal, exigiendo la renuncia del alcalde David Mollinedo, preso en Palmasola.

Los manifestantes, llegaron hasta la plaza principal y se apostaron en frente de los cívicos, exigiendo que se le levante la toma del municipio y se deje ingresar al edificio a funcionarios, al alcalde interino y a los concejales.

Los marchistas dijeron que no defienden a nadie, sino que están en contra del perjuicio que viene ocasionando a la población la toma del municipio.

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El subgobernador de la provincia Ñuflo de Chávez y jefe de Demócratas en Concepción, Elías Johns, dijo que los cívicos serán responsables de cualquier hecho que vaya ocurrir de aquí en adelante.

El líder cívico, José Serrate, no intervino en el conflicto, pero antes había anunciado una reunión de instituciones donde se definiría las acciones a tomar hasta conseguir la renuncia de Mollinedo.

La autoridad municipal, que solicitó licencia el 27 de agosto por 15 días, fue enviado a Palmasola con detención preventiva acusado de incumplimiento de deberes, conducta antieconómica y peculado, por el robo de Bs. 2.581.000 de las cuentas del Gobierno Municipal.