El viceministro de Régimen Interior y Policía, Jhonny Aguilera, calificó como un acto delictivo la detonación de un artefacto explosivo registrada a pocos metros de la casa de un vocal del Tribunal Electoral Departamental (TED) de Cochabamba.

Según la autoridad, la detonación en Cochabamba y las protestas violentas en La Paz dejaron “de ser simples amenazas para convertirse en delitos”.

Afirmó que la Policía está revisando imágenes de cámaras de seguridad para identificar al autor del hecho en Cochabamba y ponerlo a disposición de la justicia. “Estamos convencidos de que este tipo de atentados con explosivos representan un desafío para todos los bolivianos. Este acto está relacionado con el delito de terrorismo”, afirmó.

Consultado sobre las movilizaciones organizadas por sectores afines al expresidente Evo Morales cerca del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Aguilera señaló que dichas protestas buscan generar miedo, amenazar a las instituciones y desestabilizar el orden democrático.

“Muchas de estas movilizaciones están lideradas, financiadas y dirigidas por dirigentes del trópico de Cochabamba, pertenecientes a la estructura de las seis federaciones”, precisó.

Finalmente, Aguilera advirtió que el uso de la violencia en estas protestas las convierte en acciones delictivas, ya que intentan imponer demandas políticas a través de la intimidación, lo que pone en riesgo la estabilidad democrática del país.