El vocal del Tribunal Supremo Electoral (TSE) Francisco Vargas advirtió este viernes que el proceso electoral enfrenta interferencias que van más allá de lo legal y que ahora ponen en riesgo la integridad de los vocales y la estabilidad institucional. Denunció que las amenazas y la divulgación de datos personales de autoridades del TSE vulneran derechos fundamentales y buscan coaccionar el ejercicio de sus funciones.

Vargas identificó dos factores que complican el avance del calendario electoral: por un lado, la judicialización de temas estrictamente electorales en salas constitucionales, lo que distorsiona los procedimientos y afecta el principio de pluralismo político; y por otro, las amenazas directas, físicas y digitales, que ya alcanzaron incluso a sus familiares.

“Esperamos que se lleve adelante el proceso electoral en un ambiente de paz y tranquilidad”, afirmó el vocal, quien anticipó que solicitará nuevamente medidas cautelares a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. Según dijo, el clima de hostilidad no solo debilita la institucionalidad, sino que intenta condicionar decisiones que deben tomarse con autonomía.

Aunque algunos vocales del TSE han sido blanco de amenazas y ataques, incluyendo al presidente Oscar Hassenteufel y a Tahuichi Tahuichi, la Sala Plena no ha interrumpido su trabajo. Vargas aseguró que continúan con normalidad y que se mantendrán firmes en su mandato. “La ley es clara: el Órgano Electoral no puede actuar bajo presión. No vamos a ceder”.