Cuando a Evo Morales se le pregunta si se mide con la misma vara a las alcaldías de Santa Cruz de la Sierra y a la de Cochabamba, en cuanto a las denuncias de corrupción, el presidente arremete con todo en contra de la administración que dirigía José María Leyes, alcalde de Cochabamba apartado de su puesto, con detención domiciliaria y acusado de cinco delitos de corrupción pública: “No se puede comparar. La Alcaldía de Cochabamba era la caja de los Demócratas. Es un caso complicado, si los Demócratas llegan a ser Gobierno, toda Bolivia llegará a ser caja de la derecha, de los Demócratas. Felizmente se ha desbaratado”, dijo el domingo por la mañana en la residencia presidencial de San Jorge, en La Paz.

“¿Qué dice la gente en Cochabamba? Manfred Reyes robaba, pero hacía obras; Leyes roba, pero no hace obras. Hasta ahora siguen entregando obras del Cholango. Hacen pequeñas obritas, las obras grandes las hizo el Cholango. Dime una obra grande que entregó Leyes”, critica Morales.

Cuando se le insiste si las denuncias de supuesta corrupción en la Alcaldía de Santa Cruz de la Sierra -bandas, banderas, convenios de publicidad, fuentes, etc.- serán investigadas, Morales admite que no las conoce muy bien, pero califica de contundente la investigación del caso Mochilas, que fue presentado con pruebas.

Luego relató el caso de locales nocturnos, que eran multados con comprobantes en la gestión de Edwin Castellanos (MAS), pero, según las denuncias que dice que le han llegado, “se están manejando políticamente los cobros” y los empresarios de la noche cochabambinas están “cansados y arrepentidos de haber votado por Leyes”.

Los Demócratas reaccionaron con molestia. Aseguraron que no se han podido demostrar las denuncias contra Leyes y que el MAS persigue a las autoridades de ese partido. Los partidarios del Gobierno aseguran que la sigla de Rubén Costas se ha especializado en defender a alcaldes corruptos. Desde el lado de la alcaldía local, Jorge Landívar aseguró que “Percy no socapa a nadie”.

Fuego cruzado

Para Vladimir Peña, si hay un partido marcado y dañado por la corrupción ese no es Demócratas, sino el MAS. Asegura que el oficialismo tiene la facultad de sentenciar a unos y otros, de dar impunidad a los corruptos del Gobierno y sus aliados, y de perseguir a los que piensan diferente.

Peña afirma que fueron los asambleístas de su partido los que denunciaron los principales escándalos de supuesta corrupción del Ejecutivo, como CAMC, Fondo Indígena o las barcazas chinas que nunca llegaron. “Para unos hay flexibilidad, para otros se aplica la ley”, añade.

Álex Contreras, secretario Ejecutivo de la Alcaldía de Cochabamba, rechaza lo dicho por Morales. Asegura que en casi cinco meses de proceso no se han logrado probar los hechos de corrupción, pese a contar con el Ministerio de Justicia, la Procuraduría y la Fiscalía en contra del alcalde suspendido.

“En la Alcaldía de Santa Cruz tiene como aliado político a Percy Fernández y no ejecuta a sus aliados con la misma celeridad que a los opositores. Lo que dicen que hizo José María Leyes, en relación con lo que dicen que está haciendo Percy Fernández, es nada”, contestó Contreras.

Landívar consultó a Percy Fernández sobre estos dichos y él aseguró que, “a diferencia de Leyes”, ante cualquier denuncia fundada, activa los mecanismos de control posterior para procesar la denuncia, de modo que si corresponde se procesa a los funcionarios, cualquiera sea el rango.
“El alcalde Percy Fernández no socapa a nadie y exige que la gestión sea transparente y sometida a las normas y leyes que constituyen el marco de esta gestión municipal”, dijo Landívar, como vocero institucional.

Peña añade que Demócratas no tiene ningún líder que esté sentenciado, que sus representantes en todo el país, pese a ser enjuiciados y perseguidos judicialmente, han permanecido en Bolivia y han sido favorecidos nuevamente con el voto popular. Aunque Peña dice que “con otros se hacen los de la vista gorda”, no se quiere referir directamente al alcalde Fernández y asegura que ellos investigan antes de denunciar; sin embargo, Edwin Muñoz, asambleísta departamental del MAS, acusó a los Demócratas de haberse especializado en defender a alcaldes corruptos.

Rocío Molina, concejal masista de Cochabamba que inició la investigación por el caso de las compras de las mochilas chinas, dice que hasta el momento Leyes se niega a declarar sobre este caso y que el único argumento esgrimido por Demócratas es que es una persecución política.

Cuenta que durante estos cinco meses se han sumado los casos de supuesta corrupción contra Leyes. Además de los casos de la compra de mochilas de 2018 y 2017 -en el que la Fiscalía lo acusa de haber amañado la licitación para favorecer a un consorcio cruceño-, se han sumado al menos otros ocho casos: desayuno escolar, consultorías y malversación en la contratación de microempresas, entre otras denuncias.

“Mientras Leyes se niega a declarar desde su prisión domiciliaria y dice que es perseguido, hay alcaldes del MAS que están en la cárcel, como el de Morochata. La lucha contra la corrupción no tiene color político”, arengó Molina.