A marchas forzadas y presurosas, la mayoría oficialista del Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) dio luz verde a las elecciones primarias obligatorias en partidos y coaliciones políticas con la sanción de la Ley de Organizaciones Políticas con miras a los comicios generales de 2019.

Con datos del Tribunal Supremo Electoral (TSE), se supo que hay nueve partidos políticos habilitados para este proceso y 17 que están tramitando su personería jurídica, pero sólo dos (Tercer Sistema y Sol.bo) tienen listas sus firmas (el requisito mínimo es 104 mil) para habilitarse. Sin embargo, ninguno tiene su padrón interno actualizado.

Según los plazos previstos por el oficialismo, los partidos políticos, agrupaciones, colectivos ciudadanos, entre otros, deberán presentar sus binomios hasta fines de noviembre. El “Día D” de los comicios será el 27 de enero.
La votación será sólo para militantes, aunque los candidatos de binomios a primarias podrán ser no militantes.

Para la oposición, este procedimiento sólo sirve para consolidar la “ilegal” candidatura de Evo Morales y saltarse el referendo del 21F.

El documento aprobado, asimismo, establece, en el artículo 29, la obligatoriedad para los partidos políticos o alianzas de realizar elecciones primarias, con el objeto de que los militantes elijan a sus candidatos a presidente y vicepresidente, además que deben ser simultaneas.

De acuerdo con la diputada y politóloga Jimena Costa, de Unidad Demócrata (UD), esta norma fue hecha a medida para el partido oficialista, que se constituye en un instrumento jurídico, para habilitar las primarias con el objetivo de “estrangular al Sistema de Partidos”, “es una ley a medida de Evo Morales”.

Asimismo, se observa que los partidos políticos y las alianzas podrán inscribir uno o más binomios para la elección primaria, ante el Tribunal Supremo Electoral, hasta sesenta (60) días antes de la elección primaria, al sostener que debería decir “dos o más binomios”, porque si en todo caso se busca la democratización interna la existencia de un solo binomio ya no garantiza una competencia sana.

Padrones desactualizados

De acuerdo con indagaciones realizadas y requerimientos de información a instancias correspondientes, actualmente no se “cuenta con un padrón de militantes depurados de los partidos políticos”.

En la página oficial del Órgano Electoral Plurinacional (OEP), en lo que se refiere a los partidos políticos, se logró obtener una mínima información del número de militantes que alberga cada una de ellas, actualmente nueve con personería jurídica y 17 que realizan su trámite respectivo. De éstos, el que tiene mayores posibilidades de obtener para las primarias es Soberanía y Libertad (SolBo), debido a que sus libros se encuentran en revisión en la Dirección Nacional de Tecnología de la Información y la Comunicación (Dntic).

Por ejemplo, en la entrega de personerías jurídicas a los partidos políticos, se observan que el MNR, UCS (128 mil militantes, según su líder Jhonny Fernández), PDC, MAS (medio millón de militantes, según dirigentes), FRI, MDS no registran el número de militantes con los que iniciaron actividades y obtuvieron el documento.

En tanto, PAN BOL señala que obtuvo su personería con 120.014 personas; Unidad Nacional, 67.365, y el Frente Para la Victoria (FPV) cuenta con 62.511 personas.

Ahora, lo que deja en interrogante es la forma en que se trabajará sobre estos aspectos, toda vez que la ley señala que “están habilitados para participar en la elección primaria todas las y los militantes de los partidos políticos y de las alianzas que estén registrados en el padrón de la organización política a la que pertenecen, así como en el padrón electoral al momento de la convocatoria a elección primaria a realizarse en la gestión, de acuerdo a calendario electoral”.

Ahora, como este proceso está cerrado sólo para la militancia registrada, se tiene que el nivel de representación estará alrededor del 20 por ciento de la población en edad de votar.

Por otra parte, se cierra el paso a considerar la preferencia de los ciudadanos no militantes, pero políticamente activos en torno a plataformas ciudadanas que robustecen el compromiso democrático, y cuyo criterio debiera considerarse de manera abierta.

“En esta ley se retrocede y se devuelve la monopolización de los partidos políticos, porque restringe a los ciudadanos a participar, las agrupaciones, entre otros, a través de estos”, explicó Costa. Por lo tanto, sostuvo, esta norma está en el marco de un sistema de partido predominante de base corporativa y pulsiones hegemónicas (MAS), frente a un bloque de organizaciones políticas partidarias que sobreviven en condiciones precarias y adversas.

Contra el tiempo

De acuerdo con los cálculos del oficialismo, las “elecciones primarias tendrían que realizarse el 27 de enero de 2019”.

Para el efecto, el Tribunal Supremo Electoral (TSE), a la promulgación y entrada en vigencia de la Ley de Organizaciones Políticas, emitirá la convocatoria 100 días antes de las primarias. Vale decir, a mediados de octubre.
Los binomios elegidos por los partidos o alianzas deberán ser inscritos hasta 60 días antes de las primarias, es decir, hasta fines de noviembre; el registro de alianzas, con un tiempo anticipado de 75 días, entre otras exigencias, o sea, hasta mediados de diciembre.

Qué son las primarias y qué es lo que implican

Las elecciones primarias dan la posibilidad a los militantes de un partido político de elegir, de entre varios aspirantes, a los candidatos oficiales que van a competir en las elecciones generales a la presidencia y vicepresidencia por la sigla respectiva.

Existen diversos tipos de primarias: abiertas (en las que participan todos los ciudadanos); cerradas (donde participan sólo militantes), obligatorias (requisito insalvable para todos los partidos y ciudadanos) y voluntarias (de libre decisión). Sin embargo pueden ser semiabiertas, semicerradas o combinadas.

En el caso de Bolivia, son obligatorias y simultáneas para todos los partidos y cerradas para los militantes. Los espacios a utilizarse para ejecutar la votación serán los recintos constituidos por el Órgano Electoral.
Son vinculantes. Una vez que se realicen las primarias y se elija al candidato, las únicas causales que pueden revertir el carácter vinculante son la muerte o enfermedad gravísima de alguno de los miembros que son parte del binomio.

Los partidos deben adecuarse a la norma y cumplir con los plazos que se plantean dentro de la ley.

Hasta antes de la aprobación de la norma, los partidos políticos eran los que elegían de manera interna en congresos o convenciones a sus binomios presidenciales y candidatos a otras reparticiones.

Según la ley, el financiamiento de las primarias saldrá del Tesoro General de la Nación. Se estima un monto aproximado de 30 millones de bolivianos.