El abogado constitucionalista y candidato a la presidencia por el Frente Conservador Liberal Boliviano (FCL), José Carlos Sánchez, a tiempo de señalar que un gran porcentaje de los actuales representantes de la oposición boliviana están infiltrados por la izquierda internacional, pidió a la población “abrir los ojos”, investigar y saber reconocer a personajes que, pese a contar con más de 30 años en la vida política, ahora pretenden presentarse como una opción de renovación.
El jurista cochabambino, destacó que la población boliviana debe tener conocimiento de que gran parte de los precandidatos, líderes de organizaciones políticas, además de sus asesores y colaboradores cercanos, quienes dicen representar a la “verdadera oposición al masismo”, cuentan con un pasado y nexos con organizaciones de izquierda.
En ese sentido, advirtió sobre una peligrosa posibilidad de que los próximos comicios generales, programados para agosto, terminen de forma similar a lo vivido en el país en 2019, con un fraude y la llegada de un gobierno de transición que negocie con el “masismo”; Sánchez instó a la ciudadanía a informarse y poder identificar a quienes ya traicionaron los intereses nacionales.
“La población boliviana tiene que saber que el comunismo y el socialismo internacional se infiltra en la falsa oposición, ya basta de que estemos mirando a vividores de la política que están en el escenario hace más de treinta años. Ellos nos han traicionado de manera consecutiva”, dijo.
Sostuvo que la ciudadanía boliviana ya no puede seguir creyendo en “los mismos de siempre”, a pesar de los discursos que tratan de posicionar a los actores políticos de larga data y en relación con el “masismo”, como una opción renovadora en el ambiente político.
“No podemos seguir creyendo en los mismos de siempre, quienes quieren mostrarse como la renovación. Todos ellos tienen amnistías, juicios en camino y son rehenes del Movimiento al Socialismo, han transado con el ‘masismo’ a lo largo de décadas”, añadió.
La estrategia de estos actores políticos −dijo− consiste en aprovechar la falta de información abierta al público y la prisa de una población enfocada en resolver asuntos urgentes del cotidiano vivir, como un medio para evitar que sus nexos y relación con el “masismo” salga a la luz.
“Ahora quieren aprovecharse de la falta de tiempo de la población boliviana para revisar sus antecedentes históricos y sus sociedades secretas”, acotó el jurista, llamando a renovar la política en Bolivia y jubilar a los “vividores de siempre”.
Sobre la propuesta de algunos miembros de este grupo, Sánchez cuestionó la facilidad con que se habla de acudir a instancias internacionales para gestionar créditos con los que estabilice la economía nacional, con la única garantía de la persona que lo solicite.
“Esos son cuentos chinos, el Fondo Monetario Internacional (FMI) no da créditos así nomás, se tienen que cumplir varios requisitos”, precisó al agregar que ninguna entidad financiera entrega recursos sin previo estudio de ingresos y egresos, más si se trata de un país como Bolivia. “Por qué vienen los candidatos de siempre a mentirnos a todos”, cuestionó.