Aunque fue por cinco minutos, el gobernador cruceño, Rubén Costas, tuvo una breve reunión ‘a solas’ con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez Pérez-Castejón.

Ocurrió tras finalizar el acto en la Aecid en el que participó el presidente Morales; pero la misma quedó registrada solo en imágenes debido a que se impidió la cobertura de la prensa.

En este acto no se permitió el ingreso de un grupo de mujeres que pedían respeto al 21-F, pero sí el ingreso de un grupo de jóvenes activistas afines al MAS denominado Los Azules del Oriente, que estaban debidamente uniformados con poleras blancas y en la parte delantera de sus indumentarias estaba impreso el rostro de Evo Morales.

A diferencia de los afines al MAS, las mujeres del 21-F tuvieron que darse modos para hacerse escuchar, y tras subir a la terraza de un edificio contiguo a la sede de la Aecid, comenzaron a gritar los estribillos del “Bolivia dijo No” y “mi voto se respeta”.

Sus gritos se escucharon mientras Sánchez Pérez-Castejón recorría las instalaciones de la casa España y se aprestaba a compartir un almuerzo con las autoridades nacionales y departamentales.

Justo cuando los medios de prensa registraban las imágenes de las protestas del 21-F, personal de protocolo desalojó a los periodistas; de manera extraoficial se supo que uno de los becarios nacionales le obsequió al presidente español un pin del 21-F.