Los jóvenes demandan una cuota de participación en la política, así como sucede con las mujeres. Representados en organizaciones proponen la importancia de que la normativa electoral indique una cuota mínima de participación de hasta 20% en candidatos titulares y 30% en suplentes”.

Esa propuesta está contemplada en una de las cuatro demandas que jóvenes de al menos 60 organizaciones sociales debatieron durante 2024 en talleres, impulsados por la Fundación Jubileo.
A pocos meses de la convocatoria a los comicios generales, los jóvenes, en general pasan por un “desasosiego”, que no debe confundirse con desinterés de participación. La “instrumentalización” que realizan los políticos entorno a esta población genera rechazo, explicó la analista de Jubileo, Sandra Verduguez, quien compartió con La Prensa las inquietudes juveniles.

En el país, las personas jóvenes representan entre el 23,5 y el 41% de la población. Electoralmente, las y los jóvenes tienen incluso una mayor incidencia, señaló. 

En las recientes elecciones judiciales, los menores de 30 años habilitados para el voto llegaron al 31%  del electorado, mientras los menores a 40 años alcanzaron el 54% del registro.

De acuerdo con los datos del documento de las “Propuestas Ciudadanas Para el Fortalecimiento de la Participación Política de Jóvenes en Procesos Electorales”, las cuatro demandas tienen que ver con: El acceso a la información, la incidencia en los programas de gobierno, la presencia de jóvenes en instancias de representación y la conformación de misiones de observación electoral jóvenes. 

Para el acceso a la información, se planteó que el Órgano Electoral Plurinacional (OEP), en coordinación con otras instancias del Estado, diseñe e implemente programas educativos dirigidos a los primeros votantes (jóvenes en los últimos años de colegio y primeros años de universidad) donde se explique el funcionamiento del sistema político y electoral y se concientice sobre la importancia del voto. 

En la misma medida, desarrollar actividades y proyectos para dar a conocer la propuesta programática de las organizaciones políticas que compiten en los procesos electorales, donde no solo se limiten a la publicación oficial de contenidos.

La segunda demanda tiene que ver con las facilidades de diálogo de las organizaciones políticas enfocadas en los jóvenes, donde se generen espacios de concertación y compromisos.

Con base en en la Constitución Política del Estado (Art. 59, V) y en la Ley de Juventudes, piden que se promuevan “cuotas generacionales”, mediante las cuales se promueva que las organizaciones políticas consideren la presencia de candidaturas jóvenes, de forma gradual y progresiva.
También, como cuarta inquietud, exigen que se generen misiones de observación, compuestas por jóvenes. 

Demandan suprimir la necesidad de presentación de personería jurídica, y que la exigencia sea sobre un acta de constitución, el estatuto o el reglamento 
interno de la organización.