El presidente interino del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Vargas, este viernes negó que hubo presión para reconocer a la dirigencia arcista del Movimiento Al Socialismo (MAS), a la cabeza de Grover García.

“Creo que ningún vocal ha sido presionado, cada vocal tiene la libertad de decidir, de expresarse, de fundamentar su postura, su posición, de aclarar o de disentir”, dijo Vargas en una conferencia de prensa.

Según Vargas, la decisión fue asumida por cuatro de los cinco vocales presentes en sala plena. Sin embargo, el documento no tuvo la firma de los vocales Óscar Hassenteufel y Nancy Gutiérrez; uno por viaje en comisión y la otra por estar en uso de su vacación.

“Hubo una disidencia, y bueno, han sido cuatro miembros que han estado de acuerdo con la resolución y dos miembros que han estado en comisión y otra colega haciendo uso de su vacación”, explicó Vargas.

El TSE acató la Sentencia Constitucional del Tribunal Constitucional que validó el Congreso Nacional del MAS de la ciudad de El Alto, organizado por organizaciones arcistas entre el 3 al 5 de mayo. Donde García fue elegido como nuevo presidente nacional de ese partido.