El jefe de bancada del Movimiento Al Socialismo (MAS) en la Cámara de Senadores, Luis Adolfo Flores, afirmó que, a través de fallos del Tribunal Constitucional, “compra de dirigentes y persecución política”, el presidente Luis Arce pretende quedarse en el poder hasta 2040.

“Este gobierno no va a continuar solo hasta el 2025, este Gobierno va seguir hasta el 2035 o 2040. A eso están apostando”, dijo en entrevista con La Razón Radio.

En la transmisión, explicó que el Gobierno está apostando por la persecución política y el acallando de dirigentes contestatarios para permanecer en el poder. “El Gobierno ha decidido usar recursos del Estado para comprar dirigentes de todos los sectores. Ha apostado por la persecución política”.

“Van a sembrar pruebas en las casas de los dirigentes. No sé si es una total o parcial dictadura. Eso es lo que estamos viviendo”, reclamó.

El jueves, los dirigentes Humberto Claros y Ramiro Cucho, representantes de las organizaciones campesinas e indígenas, que respaldan al expresidente Evo Morales, fueron aprehendidos por distintos delitos.

Claros fue aprehendido en la plaza Bolívar, en Quillacollo (Cochabamba), según denunciaron sus allegados, por personal de Inteligencia que usaban un vehículo sin placas. En tanto, Cucho fue aprehendido en Potosí.

Ambos son acusados de delitos de asociación delictuosa e institución pública a delinquir, entre otros. En la lista de posibles aprehendidos fueron incluidos los exministros Juan Ramón Quintana y Carlos Romero, además de Ponciano Santos y Efraín Suárez.

Flores aseguró que Cucho, Claros y todos los que levanten la voz “van a ser perseguidos políticamente” por el Gobierno. “No es una persecución penal o legal”.

Finalmente, el senador lamentó que la administración de Lui Arce “está apostando” a imponer candidatos, inhabilitar candidatos y anular partidos políticos para las próximas elecciones generales de 2025.

La policía continúa con operativos para detener a dirigentes. La Policía Boliviana allanó la madrugada de este jueves la casa del exministro Juan Ramón Quintana y secuestró una computadora y dos cajas con documentos.