Medio: El Deber
Fecha de la publicación: domingo 03 de noviembre de 2024
Categoría: Institucional
Subcategoría: Tribunal Supremo Electoral (TSE)
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El Tribunal Supremo Electoral (TSE) que administra el proceso de las
elecciones judiciales atraviesa un campo minado de obstáculos que amenazan con
paralizar los comicios en cualquier momento. Por un lado, está el Tribunal
Constitucional Plurinacional (TCP), que puede rechazar o dar curso a los
amparos que piden suspender los comicios. Y, por otro lado, están los bloqueos
evistas contra el Gobierno y el conflicto creciente que mantiene aislado al
departamento de Cochabamba desde hace tres semanas.
En este escenario, a los vocales del TSE los alarma un antecedente
‘nefasto’ que pusieron los magistrados del TCP, que dieron curso a un
amparo que obliga al TSE a “indemnizar” al actual funcionario de la
Cancillería, Diego Pary por haberlo inhabilitado en 2020 como candidato a
senador por el departamento de Potosí, cuando él incumplió los requisitos de
inscripción y presentó su domicilio electoral y su residencia en la ciudad de La Paz.
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Este hecho fue calificado por los vocales del TSE como una abierta
“injerencia” de los magistrados prorrogados del Tribunal Constitucional al
Órgano Electoral, que se convierten en una especie de “administradores
de la justicia electoral” con el poder de decidir la suerte de todos los
procesos electorales a futuro, incluso de las elecciones generales.
El otro flanco que enfrenta el TSE está en los bloqueos de campesinos
afines a Evo Morales, cuyas acciones no permiten que el TSE pueda
cumplir las tareas programadas en el Calendario Electoral, por ejemplo, el
sorteo de jurados electorales que debió realizarse el 1 de noviembre.
Es por eso que se reprogramó la jornada de votación para el 15 de
diciembre. No obstante, la nueva fecha está sujeta a la resolución de los
conflictos.
“La reprogramación es por el grado de conflictividad y por
otro lado persiste que este proceso electoral esté en vilo por lo que determine
el Tribunal Constitucional”, indicó a EL DEBER el vocal Tahuichi Tahuichi.
Un
‘trascendido’ peligroso
Desde el ente colegiado, al menos tres de los siete vocales lanzaron la alerta
del riesgo que corre la realización de las elecciones judiciales, porque
los magistrados prorrogados del TCP, en cualquier momento pueden dar curso al
amparo del postulante inhabilitado Hugo Vargas Palenque, que pide declarar
desierta la convocatoria para el TSJ y el TCP, y con ello, paralizar las
judiciales.
Y este amparo, solo es uno de los 46 recursos presentados desde
el inicio del proceso que empezó en la Asamblea Legislativa y que
tiene que resolver el TCP, indicó a EL DEBER el vocal Tahuichi Tahuichi.
La autoridad electoral señaló que “el proceso de las elecciones
judiciales está en vilo”, porque conocen un “trascendido” de que los
magistrados prorrogados emitirían una resolución paralizando todo el proceso. A
ese hecho se suma, la reciente resolución del TCP que beneficia a Diego Pary
que fue inhabilitado como candidato. Este hecho, para el TSE es un antecedente
nefasto y un adelanto de la posible intención del TCP de paralizar las
elecciones judiciales.
“Imagínese el grado de intromisión, el grado de injerencia. Quiero
denunciar al mundo entero: en Bolivia, el Tribunal Constitucional
comete injerencia en el Órgano Electoral. Resulta que ahora el TCP está
haciendo el rol de administrador de justicia electoral, con ese antecedente,
todo se puede esperar de este Tribunal Constitucional prorrogado. Por eso
levantamos la voz ante Bolivia y el mundo de que existe un trascendido de que
este Tribunal Constitucional pretendería estos días paralizar el proceso
electoral judicial”, alertó Tahuichi.
Para el vicepresidente del TSE, Francisco Vargas, mientras el TCP no se
pronuncie, existe un alto riesgo de que este proceso electoral no
cumpla su curso. “Pedimos que el Tribunal Constitucional pueda pronunciarse
de manera rápida, con la mayor celeridad de acuerdo a lo que se han
comprometido”.
En ese marco, el TSE solicitó de forma escrita al TCP, que acumule en un
solo proceso todos los casos que se refieren a las elecciones judiciales.
Son 47
recursos en el TCP
Desde el Gobierno de Luis Arce, el ministro de Justicia, César Siles,
indicó que se han presentado 47 recursos judiciales contra las elecciones,
desde amparos constitucionales hasta acciones populares, y apuntó al
expresidente Evo Morales y a sus allegados de pretender paralizar las
elecciones.
Daño
económico
En caso de que el TCP resuelva la paralización de las judiciales a menos
de un mes de la fecha que el TSE fijó en un principio, se puede generar un
daño económico al Estado de grandes dimensiones, puesto que se gastó
más del 70% del presupuesto designado para este proceso electoral.
“Hasta el momento hemos erogado ya más de 150 millones de bolivianos,
porque ya estamos con la difusión de méritos de los candidatos, estamos
imprimiendo más de 16 millones de papeletas. Vamos a contratar a notarios
electorales y vamos a hacer el sorteo de jurados electorales. Es decir, estamos
con toda la maquinaria y que el TCP paralice el proceso sería un grave
daño económico al Estado”, afirmó Tahuichi.
Para la realización de las elecciones judiciales el Estado destinó al
TSE 183 millones de bolivianos, es decir, que solo quedan 30 millones de
bolivianos más para la fase final del proceso ya que hasta la fecha se gastaron
150 millones.
¿En riesgo
las generales?
Si los magistrados prorrogados del TCP suspenden las elecciones
judiciales, aparte del daño económico al Estado por caso 200 millones de
bolivianos, también se dejará un precedente que puede poner en riesgo
las elecciones generales programadas para agosto de 2025.
“Estaría en enorme riesgo el proceso electoral 2025 porque si el TCP
viola el principio de preclusión significaría que al año en pleno proceso de
elecciones judiciales y estemos en la fase final del cómputo, cualquier
ciudadano puede presentar un amparo ante una sala constitucional y determinar
que se paralice el cómputo y todo el proceso”, alertó Tahuichi.
Los procesos electorales en Bolivia se realizan bajo el principio de
preclusión establecido en la Ley 026 de Régimen Electoral. Este principio señala
que no se puede retrotraer ninguna actividad del proceso electoral que ya se
cumplió. Si el TCP paraliza las judiciales lo haría vulnerando ese principio de
preclusión, señalan desde el TSE.
Nueva
fecha
Otro factor que perjudica que el proceso de las judiciales se realice de
forma regular, es el escenario de conflictos e inestabilidad social ocasionado
por los grupos radicales del MAS, o evistas que hace tres semanas cercaron
Cochabamba con bloqueos. Es por eso que el TSE definió reprogramar la jornada
electoral por dos semanas.
Es decir, que las elecciones del 1 de diciembre se realizarán el 15 de
diciembre, además que todas las actividades programadas en el
calendario electoral también se recorren dos semanas, a la espera de
que en ese lapso, vuelva la normalidad al país.
Entre las tareas pendientes del calendario electoral está el sorteo de
jurados electorales y la contratación de notarios para que éstos capaciten a
los jurados. Ambas tareas deben realizarse de forma simultánea en todo el país.
Si el TCP define dar curso al último amparo contra las judiciales e
instruye que se declare desierta la convocatoria, el proceso se paralizará y
los magistrados del Órgano Judicial y del TCP mantendrán su prórroga otro año.