El vicepresidente del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Francisco Vargas, aseguró que el Órgano Electoral no actuará bajo ningún tipo de presión ante las amenazas recibidas por parte de sectores afines al evismo y espera que la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se pronuncie esta semana respecto a las medidas cautelares solicitadas por la institución para garantizar su labor.
“El Órgano Electoral no va a actuar bajo ningún tipo de presión. Este último tiempo fuimos objeto de una serie de amenazas de diferentes sectores y actores políticos. Como TSE, en Sala Plena decidimos pedir medidas cautelares ante la CIDH para que se garantice que nuestro trabajo en el marco de nuestras competencias y atribuciones sea sin ningún tipo de presión, en total imparcialidad, como debe ser”, sostuvo Vargas.
Según el vicepresidente del TSE, la solicitud ante la CIDH busca resguardar el derecho de los vocales electorales a realizar su trabajo con independencia y sin presiones externas, especialmente de aquellos que buscan asegurar candidaturas fuera del marco constitucional. “Culminamos los trámites hasta el día de ayer (lunes) y corresponde una respuesta en los próximos días de esta instancia internacional”, añadió.
Esta situación surge luego de que Evo Morales y sus seguidores iniciaran una marcha desde Caracollo, Oruro, que culminó en La Paz, con el principal objetivo de presionar para garantizar su postulación en las elecciones nacionales de 2025, pese a un fallo constitucional y una opinión consultiva de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) que establece que la reelección no es un derecho humano.
En este sentido, Vargas subrayó que aún no es tiempo de hablar de habilitación o inhabilitación de candidatos para las elecciones presidenciales. “Mientras no exista un proceso electoral en curso, una convocatoria o un calendario electoral, no se puede hablar de candidaturas, porque este es el órgano competente para definir cada una de ellas”, recordó.
El TSE continuará con su trabajo en apego a la Constitución y espera el respaldo de la CIDH para llevar adelante un proceso electoral sin interferencias. (Brújula Digital)