Las Iglesias Evangélicas Unidas de Bolivia retiraron su apoyo a la candidatura presidencial del ciudadano boliviano-coreano Chi Hyun Chung, quien reapareció recientemente y anunció que presentará nuevamente su candidatura para las elecciones de 2025.

El presidente de la entidad, pastor Luis Aruquipa, explicó que decidieron no respaldar a Chi porque "no es un buen candidato" para los evangélicos, debido a "todos los antecedentes personales que tiene" y que ya fueron reveladas en las elecciones anteriores.

"Lamentablemente, para ser candidato debes tener un buen testimonio, y no hemos visto ese testimonio en el pastor Chi", declaró Aruquipa a la prensa en la ciudad de El Alto.

Chi Hyun Chung sorprendió en las elecciones anuladas de 2019 al obtener el tercer lugar con un 8,78 % de los votos, siendo un polémico candidato por el Partido Demócrata Cristiano, a raíz de intervenciones contrarias a la ideología de género.

En aquella ocasión, las iglesias evangélicas cerraron filas en su apoyo, con masivas marchas que se tradujeron en un significativo respaldo electoral, pero las elecciones fueron anuladas tras el fraude que buscaba mantener a Evo Morales en el poder.

En 2020, Chi se postuló nuevamente con el partido Frente Para la Victoria, pero su votación cayó al 1,55 %, fracasando en su intento de llegar a la presidencia.

De cara a las elecciones de 2025, Chi anunció su candidatura junto al capitán de Policía Edman Lara, quien inicialmente apareció como una figura emergente, pero su imagen se deterioró tras una serie de denuncias en redes sociales sobre actos de corrupción policial que no tuvieron seguimiento ni resultados concretos.

A pesar de la situación, las Iglesias Evangélicas se declaran apartidistas y según el pastor Aruquipa, están sosteniendo reuniones de análisis para evaluar su posición.

Indicó que solicitarán los planes de gobierno de los posibles candidatos para conocer qué propuestas tienen para las iglesias evangélicas y para otras organizaciones religiosas, como las comunidades judías, musulmanas y la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, entre otras.