Nuevamente las cámaras legislativas, en especial la de Diputados, fueron escenario de disputas y desencuentros. Ya es común que las sesiones se inicien con bochornosas trifulcas en la testera, seguidas de cuartos intermedios. Eso complica la agenda legislativa y degrada el debate. Mientras tanto, continúa la incertidumbre sobre las elecciones primarias y judiciales.

El miércoles pasado, las y los diputados fueron convocados para tratar el proyecto de ley que deja en suspenso, de manera excepcional y transitoria, las elecciones primarias para binomios presidenciales. Ni bien se instaló la sesión empezaron los gritos y empujones en la testera. Una diputada hasta agredió físicamente al presidente de la Cámara, Israel Huaytari, de quien se pide su renuncia. El proyecto de ley fue aprobado recién el jueves de madrugada en medio de acusaciones e insultos.

Luego de un prolongado recorrido pleno de obstáculos, el jueves se convocó al pleno de la Asamblea Legislativa Plurinacional para conocer los informes de las comisiones y proceder a la selección de postulantes para las elecciones judiciales. La sesión se inició e interrumpió con polémica en torno al orden del día. En este caso, el factor de discordia y ruido son los magistrados autoprorrogados del TCP. El trabajo se reinició el viernes y pronto se decidió un nuevo cuarto intermedio hasta mañana.

La semana concluye, pues, con incertidumbre sobre el rumbo de las elecciones en agenda. Las primarias pasaron al Senado, donde la Comisión de Constitución aprobó un proyecto de ley que no las deja en suspenso, sino las mantiene, pero abiertas a la ciudadanía (como planteó hace tiempo Comunidad Ciudadana y ahora el evismo). Las elecciones judiciales, en tanto, están a la espera de un informe complementario de la comisión mixta sobre el TCP y con dudas sobre los dos tercios requeridos en el pleno.

Este flojo desempeño de las cámaras legislativas tiene consecuencias negativas no solo en su persistente parálisis decisoria, sino también en materia de legitimidad. El nuevo informe Delphi de la FES muestra que más del 80% de los líderes consultados considera que el trabajo de la ALP es malo o muy malo. Otros estudios de opinión pública reafirman esta percepción crítica. El riesgo es que cada vez más personas crean que el Órgano Legislativo no es necesario. Mala noticia para el Estado de Derecho.

¿Qué esperamos de la Asamblea en los próximos días? Como advirtió con preocupación el TSE, la ley para dejar en suspenso las primarias debe sancionarse antes del 17 de agosto. Por otro lado, el pleno tiene la responsabilidad de elegir por dos tercios a las y los postulantes para las elecciones judiciales (hay huecos en el caso del TCP). Pese a los acuerdos asumidos, ambos temas siguen en disputa y pueden no llegar a buen puerto. Sería otra lamentable evidencia del bloqueo y la crisis institucional.