Medio: Oxígeno Digital
Fecha de la publicación: martes 30 de julio de 2024
Categoría: Procesos electorales
Subcategoría: Elecciones Primarias
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En conferencia de prensa, Evo Morales dio a conocer su cambio de estrategia y ahora retó al presidente del Estado, Luis Arce, a ir a unas Elecciones Primarias abiertas para definir al candidato del Movimiento al Socialismo (MAS) de cara a los comicios generales del 2025.
“Viendo la situación económica, democrática, acepto a Lucho primarias abiertas, para salvar Bolivia (…) desafío, que el pueblo decida y vamos a elecciones el próximo año”, señaló Morales.
El exmandatario afirmó que en un inicio no pensaba aceptar unas Elecciones Primarias Abiertas, sino cerradas; sin embargo, afirmó que ahora acepta someterse a ese proceso.
“Es la solución más democrática (…) no comparto, pero todo por viabilizar aceptamos las Primarias abiertas”, insistió.
Morales, en ese sentido, enfatizó que no está de acuerdo con que militantes de otros partidos elijan al candidato del MAS, pero señaló que toma ese camino para “garantizar la democracia interna”.
“Si pierdo, pierdo pues. S los10 partidos se unen contra mí no tengo ningún problema, es para dar salidas democráticas, no siempre tengo que ser el ganador”, afirmó.
Morales, en ese sentido, rechazó que Tribunal Supremo Electoral (TSE) busque suspender las Elecciones Primarias, a través de una Ley consensuada en un encuentro multipartidario que contó con la presencia de representantes de organizaciones políticas, el Ejecutivo y el Legislativo.
El todavía reconocido por el TSE como líder del MAS recordó que él fue el único que no firmó el acuerdo en el Encuentro liderado por el Órgano Electoral y afirmó que eliminar ese proceso electoral es quitar una “conquista” del pueblo.
“Sin primarias no hay democracia en los partidos, las primarias son una conquista del pueblo”, señaló.
Morales insiste en su intención de ser candidato a pesar de que el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), en la parte resolutiva de uno de sus fallos, señaló que se limita a dos periodos constitucionales la cantidad de veces que una persona puede ejercer la presidencia, ya sea de manera continua o discontinua.