Y lamentablemente, con respecto al resultado del 21 F (21 de febrero de 2016), referéndum propuesto y diseñado por el mismo gobierno, en franca confesión de desear quedarse en el poder ¡por siempre jamás! actitud socarrona que minó los cimientos de la dupla Evo y Álvaro sin pensar que el pueblo podía castigar con el NO la sola intención, esgrimiendo el voto soberano, signo de democracia, doctrina política donde se respeta al que gana, así sea con la mínima diferencia. Pero, ahora el MAS en una actitud desafiante a la inteligencia del pueblo al que dice apegarse, persiste en torcer esa realidad. 

Y pretende hacer prevalecer el dictamen de un dudoso Tribunal Constitucional de una supuesta vulneración al "derecho humano" del inerme Evo Morales (cuando él es dueño del poder) sin reconocer que fue él mismo que se hizo el "harakiri" porque al interior de su partido, no se mueve ni una piedra sin que tenga su visto bueno (secreto a voces). Siendo una falacia "que el pueblo pide que sea presidente porque no hay nadie más como él" refiriéndose a sus acólitos que son una parte del país, por tanto, "no es todo el pueblo".

Y en el afán de marear la perdiz sostienen que ya se determinó en un evento nacional del MAS que Evo será sí o sí candidato en las próximas elecciones. ¿Es que la opinión de un partido político tiene más valor que un referéndum? Obviando el resultado del 21 F cuya legalidad se respalda en el voto democrático, exaltado en la Constitución Política del Estado, que dicen respetar pese a todo, juramento de por medio, aunque nunca aclararon que cuando no les convendría, no lo harían.

Este es el incordio que impulsó hasta al más impertérrito a reunirse en plataformas ciudadanas que poco a poco crecen, aunque su existencia sea minimizada por la cúpula oficialista porque "no hay peor ciego que aquel que no quiere ver" y lejos de desanimarse con inauditas amenazas la multitud indignada ante la afrenta, se expande.

Es que no está en discusión si Evo hizo o no obras (que para eso se le puso ahí, también por voto ¿o qué tenía que hacer el presidente con el dinero del país?), tampoco si fue un buen o mal gobierno. Lo que da escalofríos es que NO respeta la voluntad soberana del pueblo que fue a votar contra una re-re-elección y ganó el NO ¿Es que no se entiende que NO es NO? Por tanto, NO está habilitado en las próximas elecciones. ¿Es que no hay, al interior del MAS, ningún militante capaz de ser candidato? Y manteniéndose a Evo y Álvaro como mentores por detrás seguro que su política no tendría mayores cambios. Pero, la testarudez les ofusca al extremo que se vislumbra una agresiva respuesta de los discordes, algo que no se quisiera tener en Bolivia porque así se orillaría hasta a la muerte de compatriotas que son arengados por el odio que destilan los que se quedaron sin argumentos, angurrientos de poder.

Y en este maremágnum provocado por el MAS se exhorta a Evo y Álvaro que encabezan las injustificables explicaciones para sus oscuros propósitos que respeten el voto ciudadano y salgan por la puerta ancha de la historia y no como los autócratas faltos de escrúpulos ante la voz del pueblo que les dijo NO a una reelección indefinida vulnerando la democracia y socavando la Constitución Política del Estado dejándola depauperada a expensas de aventureros y oportunistas con el nefasto precedente.