Afirmando que la electoralización precoz en Bolivia se ha convertido en un arma de la clase política para desviar la atención de los problemas reales y urgentes que enfrenta el país, la diputada por la alianza Comunidad Ciudadana (CC), Alejandra Camargo, cuestionó que en lugar de priorizar la atención de una “creciente crisis”, la cúpula de autoridades parece estar más interesada en preparar el terreno para las próximas elecciones.
Mediante sus redes sociales, la legisladora representante del departamento de Cochabamba, lamentó que nuevamente la obsesión por llegar o eternizarse en el poder, derive en una parálisis gubernamental, donde las decisiones cruciales se posponen o instrumentalizan con fines meramente electorales, dejando de lado las verdaderas necesidades de la población.
“Este fenómeno ha profundizado la polarización en la sociedad boliviana. Los enfrentamientos entre los diversos bandos políticos no solo dividen a los políticos, sino también a la ciudadanía, creando un ambiente de constante conflicto y desconfianza, recordando incluso y peligrosamente los niveles del 2019”, sostuvo Camargo.
En ese sentido, apuntó que las discusiones políticas deberían llevar a consensos pero, en la actual coyuntura se convierten en batallas campales, donde el objetivo principal es derrotar al adversario a costa de descalificativos y guerra sucia, en lugar de buscar las soluciones para los problemas del país.
“Como resultado de todo esto, los bolivianos se encuentran atrapados en un círculo vicioso de confrontación y abandono, dejando su futuro en manos de políticos que representan más el pasado caudillista que a sus electores y bases del presente”, lamentó la asambleísta.
Por lo expuesto, volvió a destacar la importancia de la participación ciudadana en política, como un aspecto que es fundamental para romper con un ciclo de electoralización y polarización.
“Hoy en día, la verdadera democracia se fortalece cuando los ciudadanos se involucran activamente en la toma de decisiones, exigiendo transparencia, gestión, rendición de cuentas y políticas públicas que respondan a sus necesidades reales”, reiteró.
Asegurando que la participación ciudadana no solo legitima el proceso democrático, sino que también asegura que los líderes elegidos realmente representen los intereses de la población que les dio la confianza de su voto y les permitió acceder a un curul sea en el oficialismo u oposición, la asambleísta de oposición sostuvo que es momento de dejar de caer en el show farandulero de la política, en las cortinas de humo de acusadores, víctimas y oportunistas, para avanzar en la recuperación de la institucionalidad y la credibilidad de la política.
“Eso comienza exigiendo coherencia y gestión a las actuales autoridades y propuestas concretas a los candidatos precoces”, concluyó.